Granados le«sugiere» en Poblet que se preocupe de los problemas de Vila-seca, «que bastante importantes son»
Salou está a la espera de los informes definitivos y no descarta trasladar el festival Elrow a Emprius, después de la oposición de Vila-seca
La escalada de tensión entre Salou y Vila-seca por la celebración del festival de música electrónica Elrow Friends & Family en la antigua pedrera (en el término municipal de Salou) vivió este miércoles el último choque de trenes, esta vez protagonizada por el alcalde salouense, Pere Granados. «Invité a Josep Poblet que viniera a Salou o, sino, que iríamos a la Diputación de Tarragona para explicarle todos los detalles del proyecto. Estoy todavía esperando que responda», lanzó Granados durante el Pleno del Ayuntamiento de Salou, quien también destacó: «Nosotros siempre estamos dispuestos a hablar».
El debate fue empezado por el concejal del Partit Popular, Mario García, quien se hizo eco de la crítica que el alcalde de Vila-seca, Josep Poblet, tiró en la última sesión plenaria municipal, celebrada el viernes pasado, en lo referente al festival, que se tiene que celebrar el 15 de julio y que tiene que atraer a más de 15.000 personas. «No me parece bien ni el lugar ni la fecha. Es un gravísimo error», dijo Poblet. Ante estas palabras, García quiso aclarar ayer si el equipo de gobierno salouense había mantenido reuniones previas al anuncio de la celebración del festival con el presidente de la Autoridad Portuaria y con el alcalde de Vila-seca y presidente de la Diputación, Josep Poblet. Rápidamente, Granados destacó que había habido reuniones con la Autoridad Portuaria, «y no sólo eso, sino que nos explicaron cuál era la mejor fórmula para gestionar los permisos de la pedrera», subrayó.
En cuanto a las declaraciones de Poblet, la tensión se hizo evidente cuando Granados empezó la valoración diciendo: «Ellos no consultan nada de lo que hacen a su término y nosotros también nos vemos afectados». Después, recordó reiteradamente que se invitó al alcalde de Vila-seca a mantener un encuentro para «explicarle todos los detalles». «Lo he intentado por activa y por pasiva ––decía Granados--, pero Poblet no ha querido escuchar.
La valoración, sin embargo, no acabó aquí. Y es que el alcalde salouense aprovechó la intervención para «sugerir» en Poblet que se cuide de los problemas de Vila-seca y la Pineda, «que bastante importantes son». «Que nos deje a los de Salou hacer nuestro pueblo y, sobre todo, que nos deje decidir nuestro futuro», añadió, después de también recordar que el Ayuntamiento de Vila-seca había convocado una junta de local de seguridad para hablar de Elrow «de forma ilegítima, porque no es su competencia». «A quien tiene que decidir sobre aspectos de Salou son los salouenses», sentenció.
«Ni un palmo»
La oposición, sin embargo, no parecía satisfecha con las respuestas del alcalde, así que una vez pasado el turno del popular Mario García, el concejal de Ciutadans, Germán Rueda, abrió el micrófono para seguir con el debate: «Nos preocupa que el mejor acceso a la pedrera es por la Pienda».
Con los nervios ya a flor de piel, Pere Granados esgrimió: «He dado órdenes concretas para que pongan un cartel donde diga Salou. Aquella zona es Salou, el acceso es exclusivo de Salou, y la pedrera es de Salou. No necesitamos a la Pineda para nada». Granados, no quiso dejar pasar la oportunidad de evocar las palabras del exalcalde salouense Esteve Ferran durante la lucha territorial por la segregación, utilizando la expresión: «Ni un palmo, y no toleraremos que este palmo se pierda». Con el impulso cogido, el alcalde también aprovechó para recordar que la Pineda está «tomando» arena «de Salou». Hemos requerido a la Autoridad Portuaria para que cediera la extracción de la arena del banco natural que viene hacia Salou y que nos está perjudicando. Lo lucharemos hasta el final», sentenció.
Emprius como alternativa
La ubicación del festival, en la antigua pedrera, junto a los precipicios de Cap Salou, fue otro de los temas que se portaron a debate. Granados reconoció que «se priva a la espera de los permisos». En este sentido, y anticipándose a una posible negativa, el equipo de gobierno tiene al punto de mira otros posibles espacios y, según la concejala de Cultura, María José Rodríguez, este sería la zona de Emprius