Los pasteleros confían en un repunte en la venta de cocas artesanas de Sant Joan en Tarragona

Las previsiones de la venta de cocas artesanas de Sant Joan en la demarcación de Tarragona son, este 2017, más optimistas que el año anterior. Los pasteleros creen que las ventas se mantendrán estables y posiblemente «repuntarán» hasta las 50.000 unidades. Según el vicepresidente del Gremio de Artesanos Pasteleros, Josep González, para Pascua ya detectaron un incremento en la venta de monas porque que «más gente que se había asomado a la marca blanca, decidió volver a casa» y adquirir el producto tradicional.

González ha reivindicado la pastelería de calidad fachada las cocas que se venden en supermercados o en cadenas comerciales. «Hay tiendas que ya exponen cantos rodados enteros de cocas, pero nosotros las coceremos durante toda la noche para que el cliente pueda tener su coca al día», ha defendido el vicepresidente del gremio, que reúne a medio centenar de asociados a la demarcación. Las cocas preferidas de los tarraconenses, con un precio que se mantiene entre los 20 y los 25 euros el kilo, son las de frutas, crema y cabello de ángel.

Se prevé que los catalanes coman cerca de 17 millones de cocas de Sant Joan

A nivel de Cataluña, los pasteleros caatalans confían en que se coman cerca de 1,7 millones de cocas, una cifra un 1,5% superior a la del año anterior. El presidente del Gremio de Pastelería de Barcelona y Provincia, Elies Miró, ha explicado que el 1,5% representa un «repunte tímido», pero lo valoran muy positivamente y, de hecho, refuerza la tendencia de los últimos últimos tres años. Sin embargo, ha admitido que será complicado que las cifras vuelvan a los niveles anteriores de la crisis. Con respecto a las más vendidas, volverán a ser las tradicionales de brioche con crema, frutas y piñones o la de chicharrones. Sin embargo, este año también habrá novedades en las diversas pastelerías del país como una coca en forma de piña y coco deshidratado, piñones y piña caramelizada del pastelero barcelonés Daniel Jordà o una de coca de crema quemadura de Oriol Balaguer. Por término medio, los precios de las cocas se mantendrán entre los 16 y los 35 euros en función del tamaño.