Los trabajadores de Grues Leman denuncian acoso sindical de la dirección
La plantilla está intentando crear un comité de empresa, y aseguran que a raíz de eso se derivan sanciones y despidos «sin motivo»
Los trabajadores de la empresa GruesLeman S. A. de La Pobla de Mafumet, formada por Miguel Ángel Dolent García (Director General) y Samuel Molero Dolent (Director de finanzas), denuncian que están sufriendo una «situación de acoso y persecución sindical sin precedentes». La plantilla, formada por 56 trabajadores, según informa el sindicato CGT a través de un comunicado, está intentando formar un comité de empresa con la misma Confederación General del Trabajador (CGT) de Tarragona, «y por eso se derivan sanciones y despidos sin motivo en varios miembros del comité y a otros compañeros». Según la plantilla, la finalidad de la dirección es «crear un clima de represión y miedo para intentar crear el comité de empresa».
Los trabajadores afectados por estas sanciones y despidos «llevan más de 10 años trabajando en una situación de falta de mantenimiento, tanto de las instalaciones que la empresa tiene en la Pobla de Mafumet como de su maquinaria para la realización de sus trabajos».
El sindicato también denuncia que en los últimos 5 años, sólo se ha proporcionado a los trabajadores una muda de trabajo, «infringiendo la ley, que dictamina 2 mudas por año». Los trabajadores también aseguran que a pesar de ser una empresa de servicios que cubre urgencias en la mayoría de petroquímicas de la demarcación, «carecemos de turnos de guardia y de su correspondiente gratificación. Al negarnos, recibimos fuertes amenazas por parte del dirección».
La denuncia también va dirigida en contra de los dos directores, que han tomado las rentas de la empresa en los últimos 5 años. «En este tiempo, se acumulan numerosas bajas por ansiedad de los trabajadores para verse sometidos a la presión ejercida por los nuevos directores». «Estamos hartos de las manipulaciones de estos directivos cínicos con abuso de poder, que aseguran que todo eso es culpa nuestra», sentencian los trabajadores. «No nos pagan el día establecido, no nos dejan trabajar y nos culpan de sus errores», concluyen.