El Ayuntamiento de Vilallonga reconoce la falta de licencia del Encanteri para celebrar banquetes con música
Los vecinos que lo denunciaron por el ruido consideran que la actividad no se puede legalizar y reclaman el cierre inmediato. El consistorio quería celebrar el domingo un aperitivo de fiesta mayor en el restaurante, pero finalmente ha trasladado el acto
Nuevo capítulo en el enfrentamiento entre el Ayuntamiento de Vilallonga del Camp y el grupo de vecinos que han denunciado reiteradamente la afectación que sufren por los ruidos de las celebraciones nocturnas en el restaurante el Encanteri.
El consistorio, en respuesta a la denuncia presentada por el abogado de los vecinos, Ángel Bretón el pasado 29 de junio, replicó explicando cuáles habían sido las medidas realizadas por el Gobierno municipal. Y en esta respuesta se reconocía, de manera implícita, la ilegalidad de la sala de banquetes anexa que tiene el restaurante y que es el origen de la polémica.
Así, el documento, firmado por el mismo alcalde, Ignasi Valera, señala por una parte, que el pasado mes de mayo emitieron un «oficio externo» dirigido a la Directora General de Calidad Ambiental y Cambio Climático, «en el cual solicitábamos que, lo más pronto posible, se pusieran en contacto con nosotros con el fin de realizar un estudio acústico».
No se explica en esta carta al abogado de los vecinos si tuvieron respuesta ni porque en lugar de contactar directamente, lo que quieren es que sea la Generalitat la que se ponga en contacto con el consistorio.
Sí que en el documento municipal se explica que el 14 de junio pasado se requirió al titular del establecimiento el Encanteri, «a fin de que solicite licencia municipal para la actividad que realiza», aportando la documentación de acuerdo a un informe previo del ingeniero municipal.
Acto seguido, sin embargo, se indica desde el Ayuntamiento que el 29 de junio, quince días después, «el titular del Encanteri presenta escrito en el cual solicita que se le conceda una prórroga para poder presentar la documentación que se está redactando solicitada». No se indica si la prórroga le fue concedida, aunque se da a entender que así ha sido.
De esta manera, el consistorio reconoce que el restaurante no dispone de la licencia de actividad para la celebración de banquetes con música en la instalación anexa que se construyó al lado del edificio principal del establecimiento.
Con la respuesta municipal a la mano, los vecinos afectados, a través del abogado Ángel Bretón volvieron a presentar, el 11 de julio pasado, un escrito ante el Ayuntamiento en que, entre otros aspectos, reclamaban que se procediera al cierre inmediato de la actividad de la sala de banquetes. El argumento legal que esgrimen los vecinos es que el denominado 'Salón Fabergé' según la misma web del restaurante, no se puede legalizar porque se construyó en suelo no urbanizable.
Según el abogado, aunque ahora la finca está catalogada como suelo urbanizable no urbano, para poder autorizar la construcción y la actividad previamente habría que aprobar un plan parcial y un proyecto de reparcelación.
La nueva denuncia vecinal recuerda que aunque el consistorio es consciente de la ilegalidad de la actividad y que el restaurante ha sido requerido, durante los fines de semana de mayo, junio y julio se han seguido celebrando fiestas en el salón, en todos los casos, afirman a los vecinos, «hasta las 4 de madrugada».
De hecho, en el escrito de denuncia, el abogado recopila diferentes imágenes de páginas de Facebook de disc-jockeys que participan en las celebraciones del Encanteri, un local que oficialmente tan sólo tiene permiso otorgado para poner 'música de ambiente' con un equipo de música.
A pesar de la situación del establecimiento y el conflicto abierto con los vecinos, el Ayuntamiento tenía previsto celebrar este domingo el aperitivo de fiesta mayor para los vecinos. Finalmente el consistorio ha hecho marcha atrás y ha trasladado el acto a otro restaurante del municipio.