El Vendrell prevé derribar las partes deterioradas del Brisamar

El Ayuntamiento del Vendrell tiene previsto derribar aquellas partes del edificio del antiguo Cinema-Teatre Brisamar de Coma-ruga que se encuentran más degradadas y que pueden representar un peligro para la vía pública. Según fuentes municipales, el proyecto está redactado, aunque, por ahora, no se han dado a conocer los plazos ni cuando se pondría en marcha.

Precisamente hace pocos días, la Asociación Agrupación Vecinal Sant Salvador/Coma-ruga/Francàs presentó una solicitud en el consistorio pidiendo que «el ayuntamiento se haga cargo del edificio, haciendo las actuaciones convenientes para que no sea un peligro para los ciudadanos que pasen por la zona, y que haga una limpieza de todo el edificio y de los alrededores.»

La demanda se ha realizado ante los desprendimientos que últimamente se han producido en la fachada del antiguo cine, totalmente cerrado desde hace cinco años, cuando en el 2012 el Ayuntamiento lo pilló definitivamente, después de adquirirlo el año 2008. El equipamiento hacía tiempo que estaba en una mala situación, y la deuda que arrastraba era de 1,2 millones de euros. En septiembre de 2008, el Ayuntamiento del Vendrell lo compró con el fin de relanzarlo y, así, evitar su quiebra. La llegada de la crisis, sin embargo, imposibilitó que el consistorio pudiera asumir los costes y el Cine-Teatro Brisamar de Coma-ruga cerró puertas, después de 60 años de historia. Con el paso del tiempo, el edificio se ha ido degradando, tal como muestran los vecinos a través de las imágenes incluidas a la solicitud hecha llegar al Ayuntamiento, donde se perciben los escombros derramados por la vía pública. Hoy por hoy, las medidas tomadas por el consistorio han sido instalar una valla a todo el perímetro para evitar que los desprendimientos afecten a los peatones, además de tapiar todos los accesos para que nadie pueda entrar en el interior.

Por otra parte, la Asociación Agrupación Vecinal hace una segunda demanda, y esta es que el Ayuntamiento dé «una salida a la inversión de compra realizada». Así, se hace referencia a la adquisición del edificio realizada por parte del consistorio el año 2008 y se pide que «genere beneficios tanto económicos como sociales en la zona mediante proceso participativo». Esta opción, sin embargo, parece, de momento, muy alejada. Y es que, primeramente, habrá que rehabilitar el edificio, mientras que, por ahora, tan sólo hay sobre la mesa un proyecto para derribar las partes más deterioradas del antiguo cine.