Unas 4.000 familias del Camp de Tarragona, en riesgo por el bajo precio de la avellana
Unió de Pagesos dice que esta temporada han vendido por debajo del precio de producción y que en este contexto la fruta seca «no sale a cuenta»
La principal fuente de ingresos de unas 4.000 familias del Camp de Tarragona se encuentra en situación de riesgo por el bajo precio de la avellana que, según asegura Unió de Pagesos, ha hecho que esta temporada hayan tenido que vender por debajo del precio del coste de producción.
Desde septiembre de 2016 hasta ahora el precio ha bajado un 33%, situando la variedad negrita –la de más calidad y la más producida en la zona– en unos 1,45 euros la libra. El sindicato atribuye las causas en una mejor cosecha en Turquía y a una demanda más restringida de la industria. Con respecto a la almendra, la bajada de precio ha sido de casi el 43% desde enero de 2016. La bajada de precio desde hace casi dos años se ha agravado por los efectos de una cosecha récord en los Estados Unidos.
Aparte de los puestos de trabajo, un alargamiento de la situación pondría también en riesgo el mantenimiento de unas 10.000 hectáreas de terreno que actualmente se dedican al cultivo de la fruta seca en Cataluña, 9.000 de ellas en el Camp de Tarragona. «Ha habido una bajada importante, porque en los años 90 habíamos llegado a tener unas 33.000 hectáreas plantadas.
Tal como explica el responsable nacional del sector de la Fruita Seca del sindicato, Rafel Español, la situación es límite porque en estas condiciones producir avellana «no sale a cuenta»: «Que esté por debajo de los dos euros ya es una situación mala». Español lamenta el agravio comparativo que existe entre los precios de la Lonja de Reus por la misma variedad, en comparación con las de otros países como Italia o Turquía –50 y 30 céntimos menos para la misma variedad, respectivamente.
La mala temporada llega después de unos años de resurgimiento en que, según indica, «los productores habían invertido para conseguir recuperar hectáreas de plantación» y en que «algunos jóvenes se han animado a volver al campo». Ahora, lamenta, hay mucha preocupación porque esta recuperación había venido acompañada de inversiones que no podrán recuperar. Sin embargo, Español asegura que la avellana es un producto «de futuro, como lo indica el hecho de que cada año más países plantan avellanos».
No entendemos esta bajada de precios, que nos parecen distorsionados. «La industria dice que busca la estabilidad de precios sin embargo, ¿cuál es esta estabilidad?», lamenta Español, que también indica que hay una diferencia muy grande entre el precio de la avellana cruda y el del producto final, ya sea la avellana o sus derivados. En este sentido, Unió de Pagesos hace una valoración negativa del funcionamiento del Observatorio de precios de la Generalitat, y apuesta por rectificar de manera urgente la metodología.
El jueves que viene, la Lonja de Reus ha citado los representados sindicales para discutir un nuevo reglamento sobre el establecimiento de precios, una reunión sobre la cual, según los documentos vistos, no tienen buenas expectativas. «La temporada ya no hay quien la salve», remacha Español. Por otra parte el sindicato ha convocado una asamblea el día siguiente a la reunión, el día 1 de diciembre, para informar de la reunión y de los próximos pasos a hacer. «Seguro que haremos alguna movilización, pero tenemos que ver cómo evoluciona todo», explica Español.