El Pacto de Berà 'exige' a Fomento que los camiones no pasen por la N-340

Los alcaldes del Pacto de Berà han reanudado las acciones para reclamar soluciones al colapso de tráfico y a los accidentes en la carretera N-340. En concreto, reclaman las medidas que se tenían que implantar este pasado 1 de enero, la más destacada de las cuales era la prohibición de circular camiones. Así lo han pedido al Ministerio de Fomento.

Los ayuntamientos llegaron a un acuerdo con la Generalitat el año pasado, con el apoyo del Gobierno central, para adoptar medidas que mejoraran la seguridad de la carretera N-340. La coyuntura política actual de Cataluña ha frenado la implantación de estas medidas. El Ayuntamiento de Calafell se hacía eco el mièrcoles de las reivindicaciones de los alcaldes del Pacto de Berà –del qual forma parte– y recordaba que «una serie de accidentes ocurridos en las últimas semanas, incluso con víctimas mortales, ha disparado la alarma de los alcaldes del pacto que piensan que, si las medidas ya eran urgentes, ahora no se puede esperar ni un día más. Haya o no gobierno en Cataluña.» Los alcaldes del Pacto de Berà se han dirigido al ministerio de Fomento para exigirle que el acuerdo alcanzado hace unos meses se lleve a la práctica con carácter inmediato.

Según el acuerdo, desde el pasado 1 de enero los camiones tendrían que haber empezado a circular obligatoriamente por la autopista AP-7 entre Altafulla y Vilafranca del Penedès. El Pacto de Berà recuerda que el tráfico habría sido bonificado con un 42,5% de descuento para los camiones de paso, y un 50% para los desplazamientos locales. La otra medida es la gratuidad para los turismos entre Vilafranca del Penedès (entrada sur) y Ulldecona, en las Terres de l'Ebre cuando el viaje de ida y vuelta se hiciera en un máximo de 24 horas. Era el mecanismo para favorecer los desplazamientos diarios por motivos de trabajo o de estudios.

Según el alcalde de Altafulla y portavoz del Pacto de Berà, Fèlix Alonso, «aunque la investidura esté prevista de aquí a poco tiempo, no podemos esperar. Porque, después del nuevo Gobierno, vienen los cambios de conselleres y, después, los nuevos directores generales. Si tenemos que esperar que los nuevos responsables empiece a reunirse con el Ministerio de Fomento o con el concesionario de la autopista, no acabaremos nunca».