Tres personas mueren en un choque entre dos coches y un camión a Coma-ruga
Un vehículo de gran tonelaje hizo la tijera en la carretera N-340 y chocó contra dos coches que circulaban en sentido contrario
Tres personas murieron ayer tarde en un accidente de tráfico en l'N-340 a Coma-ruga, en el municipio del Vendrell. Según el Servicio Catalán de Tráfico, el aviso del siniestro se recibió a las 15.52 horas y tuvo lugar en el punto kilométrico 1.190, donde por causas que se están investigando, un camión articulado que iba en sentido sur hizo la tijera y chocó con dos turismos que circulaban en sentido contrario. A consecuencia del choque, los tres ocupantes de uno de los dos turismos murieron. Los tres son de la misma familia: la hija, el padre (35 años) y la abuela. En el otro vehículo implicado en el accidente viajaba un matrimonio y su hija (de 21 años), que resultaron heridos de poca gravedad y fueron evacuados al hospital comarcal del Vendrell.
A raíz de esta incidencia, se activaron siete patrullas de los Mossos de Esquadra, cuatro dotaciones de los Bomberos de la Generalitat, que tuvieron que hacer tareas de excarcelación en los dos turismos, y cuatro ambulancias y un helicóptero medicalizado del Sistema de Emergencias Médicas (SEM).
El camión articulado circulaba en sentido sur cuando, por causas que se desconocen, invadió el carril contrario y chocó contra un Peugeot que circulaba en sentido norte. El coche quedó bajo el vehículo de gran tonelaje y los tres pasajeros perdieron la vida. En el siniestro también se vio implicado otro coche que también circulaba en sentido norte, donde tres personas resultaron heridas de poca gravedad. Con respecto al conductor del camión, dio negativo en el control de alcohol y drogas y no sobrepasaba los límites de velocidad. Ahora habrá que comprobar si sobrepasaba los límites de tonelaje que podía transportar.
A causa del accidente, y con el fin de hacer las tareas de retirada del camión, se tuvo que cortar la salida del Vendrell Sud de l'N-340. Además, durante casi dos horas, esta vía quedó cortada en sentido sur y en el punto del accidente se hicieron desvíos señalizados.
Resurge la polémica
El accidente mortal de ayer tarde en la carretera N-340 hizo resurgir la polémica sobre la necesidad de desviar los camiones de l'N-340 hacia la autopista AP-7 a su paso por la demarcación de Tarragona. «Accidente mortal a Coma-ruga que no tendría que haber sucedido nunca, si se hubiera cumplido el acuerdo de desviar los vehículos pesados por la AP-7», tuiteaba ayer el alcalde de Altafulla y diputado en el Congreso de los Diputados por|para en Común Podemos, Fèlix Alonso, quien se dirigía a Fomento para afirmar: «No hay excusa, la gente sigue muriendo en l'N-340». Quién también se hizo eco de esta problemática fue la Unión de Plataformas de Movilidad de Cataluña (MOB Cat), quién exigió «¡Nuevo modelo viario ya! Bastantes peajes», además de añadirse a las críticas a Fomento y también en Territorio, culpándolos, de «incompetencia y recordando que la situación es «muy grave».
Justamente hace cinco meses, el entonces conseller de Territorio y Sostenibilidad, Josep Rull, anunció que a partir del 1 de enero de este año 2018 los camiones que circulan por la carretera N-340 se tendrían que desviar obligatoriamente hacia la AP-7, tal como reclaman, desde hace años, los alcaldes de la zona. La noticia fue muy bien recibida por el territorio, sin embargo, el pasado mes de diciembre, Fomento evitó poner fecha al desvío, quedando en el aire, hasta hoy mismo, la medida que tenía que descongestionar la vía.