El Ayuntamiento de Valls destinará una parte de sus presupuestos a la Fundación Proactiva Open Arms

El concejal de Bienestar Social y primer teniente de alcalde de Valls, Jordi Cartanyà, anunció este martes durante el pleno que este año se destinará una parte de los recursos económicos de los presupuestos a la Fundación Proactiva Open Arms. Desde el consitori vallense quieren ayudar a la entidad en su tarea de rescate de personas en el Mediterráneo, sobre todo ahora que está siendo víctima de una persecución por parte de las autoridades italianas.

La Concejalía de Bienestar Social se ha ido consolidado la política de cooperación internacional, con aportaciones anuales de 10.000 euros del presupuesto municipal a proyectos de ayuda a los refugiados y a comunidades originarias de países en vías de desarrollo que tienen vínculos con Valls.

A través del Fondo Catalán de Cooperación al Desarrollo, el consistorio destinó el año 2017 un total de 10.000 euros a un proyecto de sensibilización contra la mutilación genital femenina en Gambia y a un programa para favorecer los derechos de salud de los refugiados sirios y libaneses en Aarsall. El 2016, les había destinado a dar apoyo a las mujeres de los municipios rurales de la región de Tánger y Tetuán a Marruecos y a la acogida de la población refugiada en tráfico en Europa víctima de los conflictos armados en el área del Mediterráneo.

Además de destinar recursos económicos a la cooperación internacional, Valls ha acogido hasta ahora a 8 refugiados provenientes de zonas en conflicto.

La Fundación Proactiva Open Arms fue noticia hace unas semanas, cuando uno de sus barcos quedó confiscado en Italia por orden de la fiscalía de Catania para ser considerarla «una asociación criminal dedicada a la inmigración ilegal». El barco de la organización catalana atracó en el puerto de Pozzallo después de un incidente con los guardacostas de Libia cuando emprendía un rescate de inmigrantes a unas 73 millas de la costa, muy lejos de su jurisdicción. Y la noche del domingo, se ordenó su incautación. A raíz de esta situación, tres miembros de la tripulación del barco de rescate de inmigrantes están encausados en Italia y se enfrentan apenas de entre 4 y 7 años de prisión.