Nuevo paso adelante para la configuración de una región del conocimiento en la Catalunya Sud

La iniciativa tarraconense que reivindica el territorio como Región del Conocimiento Catalunya Sud adelanta un nuevo paso adelante y se presenta a la sociedad. Liderado por la Diputación de Tarragona y la URV, el proyecto quiere ensancharse con la visión de expertos. Se harán varias reuniones para recoger todas las voces. Desde la Universidad se reconoce que el proceso tiene más cariz «político» que del conocimiento, ya que implica que el territorio camine solo como región propia -si bien no se entra de forma estricta en los límites geográficos-, en una reordenación de competencias que tiene que pasar para|por el Parlament de Catalunya. La URV sostiene que Cataluña es «demasiado grande» como para mantenerse como una única región del conocimiento y que, en este sentido, el país pierde «eficiencia». Este planteamiento, que se empezó a construir el año pasado a través de un acuerdo marco entre administraciones y mundo universitario, ya se está extendiendo a otras regiones universitarias. El objetivo es que el proyecto se pueda presentar públicamente el año que viene.

La idea del denominado grupo nuclear gestor -formado por políticos locales de las capitales de comarca y los municipios mayores del territorio, de las delegaciones del gobierno del Campo y el Ebro y un representante de Presidencia de la Generalitat- es que el proyecto quede terminado y presentado antes de las elecciones municipales del próximo año.

Los impulsores están más que convencidos de las bondades de la nueva reordenación, una iniciativa surgida en Tarragona, pero que se puede aplicar en las diferentes universidades del conjunto del país. De hecho, en las comarcas centrales ya se estaría cuestionando esta necesidad de fijar una nueva reordenación del conocimiento más específica.

«Sin fronteras definidas»

«No estamos ante un movimiento reivindicativo, sino de poner en evidencia que la ordenación y la toma de decisiones no es todo el eficiente que podría ser», ha afirmado el director de la Cátedra Universidad y Región del Conocimiento, Francesc Xavier Grau. «Hay» que identificar las diferentes regiones que hay en Cataluña y se las confiera las competencias para poder desarrollarse, y eso tendrá que ser una decisión del Parlament», ha añadido.

Grau considera que el país «es demasiado grande» para actuar como una única región. «De las 276 regiones de conocimiento que hay en Europa, el tamaño medio en PIB y población, se parecen más a Tarragona que a Cataluña; hace falta un replanteo de la política regional interna». A la vez, cree que se produce un cierto «vacío|hueco» ante «necesidades regionales», ya que el territorio no tiene competencias para tomar sus propias decisiones.

Según Grau, en el caso del territorio tarraconense, el proyecto no entra explícitamente al delimitar fronteras ni límites -teniendo en cuenta el debate abierto sobre provincias, demarcaciones y veguerías-, y que sólo plantea que cada región tenga bastante base de conocimiento y pueda hacer la suya propia estratégica de búsqueda e innovación -la RIS3, Research and Innovation Smart Specialisation Strategy, actualmente engloba toda Cataluña.

«Es un proceso que hoy nace sin fronteras definidas, y por este motivo lo bautizamos como Catalunya Sud», ha remarcado Francesc Xavier Grau .La iniciativa, que ahora se hace extensible a la sociedad para buscar la complicidad de varios agentes, se ha trabajado hasta ahora en sesiones internas. También se han visitado regiones universitarias equiparables a las dimensiones de Tarragona y el Ebro, como Tampere en el sur de Findlàndia, o Trentino en Italia.

Esta semana y la próxima ya se han programado encuentros en varias poblaciones -Alcover, Tortosa y el Vendrell- con cerca de 300 expertos con el objetivo de enriquecer el proyecto y que sea más «conocido» y «participado». «Lo estamos construyendo, todavía no está finalizado; Catalunya Sud fortalecerá nuestra región, porque tendremos capacidad de planificarnos, innovar y ser más competitivos,» ha manifestado al presidente de la Diputación, Josep Poblet.

«El conocimiento es una fuerza productiva en sí misma, y no trabáramos liderazgos compartidos en una estrategia común sería imperdonable y desperdiciaríamos una excelente oportunidad», ha lanzado Poblet. «Es un camino de decisión política», ha concluido Grau.