La Pobla de Montornès sufre continuos vertidos ilegales de poda
Jardineros de otros municipios y particulares que no están dados de alta como tal descargan los restos en sus contenedores
El municipio de la Pobla de Montornès se enfrenta a un problema de difícil solución. El servicio de recogida de los contenedores de restos de poda tiene que recoger, no sólo lo que los vecinos de esta localidad generan, sino también lo que profesionales de la jardinería de otros municipios o particulares que hacen el servicio sin estar dados de alta como empresa vierten a sus islas.
Vecinos de la Pobla de Montornès denunciaban esta semana la existencia de islas de contenedores a la urbanización Poblamar que, desde hace días, están llenas a tope de restos de poda, pero también de trastos, hasta el punto que ocupan parte de la acera. El concejal de Urbanismo, Medio Ambiente y Tráfico del municipio, Joan Bonet, asegura que el servicio de recogida de poda es suficiente para atender este municipio, donde más de la mitad de la población vive en urbanizaciones donde predominan las casas unifamiliares con jardín.
«Llega un momento en qué el servicio –que es para no profesionales– tiene un coste y está pensado para la población de aquí, pero viene gente de fuera y descarga las furgonetas en nuestros contenedores, aprovechando, sobre todo, zonas más aisladas o de paso, como a la isla de contenedores del antiguo campo de fútbol», dice Bonet, quién recuerda que la falta de un cuerpo policial local hace que estos vertidos ilegales se lleven a cabo con total impunidad.
El servicio de la recogida de la poda lo hace el Ayuntamiento a través de la subcontrata de Nordvert. «Normalmente, la recogida de poda se lleva a cabo una vez a la semana, sin embargo, cuando hay puntas de afluencia de vecinos, la frecuencia se hace dos veces a la semana. Por otra parte, se hacen recogidas puntuales, si un contenedor está muy lleno», recuerda Bonet.
Al problema de los restos de vertidos de poda ilegales, se suma también el incivismo. «Aparte de tener sitios donde depositar los voluminosos, ofrecemos dos servicios, pero hay gente que no los usa y son vecinos de aquí», asegura el concejal de Medio Ambiente.
El segundo domingo de cada mes la unidad móvil se desplaza a la Pobla de Montornès y recopilación de todo. Por otra parte, el Ayuntamiento ofrece un servicio de recogida, dirigido especialmente a las personas mayores. Los vecinos llaman y un vehículo pasa a recoger los trastos que quieren tirar. «Sin embargo, después hay quien, directamente, de todo en los contenedores de la poda o a cualquier sitio,» añade al concejal de Medio Ambiente Joan Bonet.
Desde hace dos años, el Ayuntamiento de la Pobla de Montornès está a la espera de que el resto de municipios mancomunados al servicio de recogida de la fracción orgánica y selectiva firmen el nuevo contrato, lo que permitirá que el Ayuntamiento mejore el servicio, incremente el número de contenedores y reubique las islas.