Detienen a dos ciudadanos pakistaníes por tráfico de seres humanos para explotarlos laboralmente
Los detenidos captaron con una falsa oferta de trabajo a la víctima, en la cual la hacían trabajar en un comercio de Valls de forma seguida sin pagarle
La Guardia Civil en colaboración con Inspectores de Trabajo del Departamento de la Seguridad Social ha detenido a dos hombres de 45 y 31 años de origen pakistaní como presuntos autores de un delito de tráfico de seres humanos con finalidad de explotación laboral. Los hombres, detenidos en la operación ‘Mister Pan’ desarrollada en Tarragona, captaron a un compatriota suyo en Italia con una falsa oferta laboral en España y lo han sometido a un trabajo continuo en sus comercios sin pagarle. Los detenidos son el amo de varios comercios en las demarcaciones de Tarragona y Barcelona y el encargado de estos locales en Tarragona.
La investigación se inició en abril, cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento que un ciudadano de origen pakistaní se encontraba en situación de explotación laboral en un comercio de Valls. Según supieron los investigadores, el hombre se encontraba en situación irregular en Italia y estaba retenido en un centro de internamiento de extranjeros. A través de un conocido del mismo centro, estableció contacto con una persona de origen pakistaní residente en España que decía tener varios negocios, ofreciéndole trabajo con un contrato de trabajo y la falsa promesa de regularizar su situación legal y laboral.
Durante el mes de marzo de 2017, el responsable de la oferta se desplazó hasta Italia con el fin de captar al futuro trabajador, interviniendo directamente en su traslado, mediante transporte público, desde Italia hasta Valls. Una vez en la mencionada localidad fue alojado en una vivienda arrendada donde residía la persona de confianza del explotador, manteniendo de esta manera un control sobre el empleado.
La persona captada, fue explotada durante más de 10 meses en varios comercios de la localidad, con jornadas de trebal maratonianas de 14 horas diarias durante los 7 días de la semana sin recibir a cambio ningún tipo de compensación económica.
La Guardia Civil estableció un operativo policial al inicio de este mes de junio en qué se inspeccionaron los diferentes establecimientos comerciales cuyo titular era la persona investigada. En uno de ellos se detuvo a su propietario y el encargado como responsables de un presunto delito de tráfico de seres humanos con finalidades de explotación laboral.
Los investigados, aprovechando la situación de pobreza, engañaban compatriotas mediante contratos de trabajo, sufragando los gastos de desplazamiento desde origen y, una vez en España, los alojaban en viviendas arrendados, donde convivían con el explotador o con su persona de confianza. En caso de que la víctima pretendiera desligarse del trabajo, se lo perseguía, coaccionaba y amenazaba llegando incluso a agredirla físicamente.
Los detenidos fueron puestos a disposición del juzgado de instrucción número 1 de Valls.