Miami Platja continúa la tradición de las 'vaquillas|vaquetas' con una plaza llena hasta los topes

Miami Platja vivía ayer una intensa tarde de emociones en la plaza del Cincuentenario, el espacio escogido para abrir el recinto donde se celebró uno de sus actos con más tradición y más arraigado, las vaquillas. Como cada año, la plaza se llenó hasta los topes para ver como los miembros de las peñas saltaban, hacían recortes delante de los animales o intentaban lidiar con estos.

Con respecto al mantenimiento de una tradición que no vive su mejor momento, el concejal de Fiestas del Ayuntamiento de Mont-roig del Camp, Ángel Redondo, aseguraba que «en este tipo de actos siempre hay controversia y lo entendemos». «Pero una de las premisas, precisamente de la cual la comisión tiene especial cuidado|cura es que no haya ningún tipo de maltrato animal. Las peñas son los principales valedoras de esta fiesta porque saben que, en caso de no hacerlo bien, se acabará suspendiendo», añadía. «Lo prioritario es que no toquen la vaquilla, ni lo estiren de la cola, si alguien no lo hace correctamente, es expulsado de la plaza», detallaba.

Ayer, sin embargo, los participantes de las peñas se vieron obligados a estirar uno de los animales de la cola. La segunda vaquilla era pequeña y entraba medio cuerpo constantemente por los barrotes de seguridad de la arena. Para sacarla, tenían que estirarla de la cola.

Las carrerillas de los miembros en la plaza no están exentas de riesgo. Ayer, de hecho un joven resultó herido levemente al ser embestido por la vaquilla. Los animales salen a plaza unos quince minutos. Ayer por la tarde participaron seis. «Las personas que salen a correr son miembros de las peñas. Hay nueve peñas, con una capacidad máxima de 500 personas. Este año se ha creado una décima peña», apuntaba al concejal.

Durante el descanso se ofrecía ayer otro espectáculo, también tradicional: los miembros de las peñas tenían que intentar subirse por el palo engrasado colocado en medio de la plaza para conseguir uno de los jamones colgados en la parte posterior.

«Las fiestas están siendo un éxito. La incomodidad de las obras en la avenida Barcelona existe, es evidente, pero ayer (sábado) pudimos celebrar la fiesta de la Nacional 340. En vez de hacerla en dos kilómetros, se redujo el espacio a 500 metros», decía el edil.