Los terroristas estuvieron en el casino Las Vegas de Salou antes de los ataques
Parte de las bombonas que estaban en Alcanar las habían comprado a través de Wallapop y tuvieron que pedir préstamos
Miembros de la célula yihadista de Ripoll, que atentaron en Cambrils y Barcelona el verano pasado, estuvieron, pocos días antes de los hechos, en un casino de Salou, Las Vegas, ubicado en la céntrica calle Barcelona de la capital de la Costa Daurada. Este es uno de los detalles más del sumario que en las últimas horas se están dando a conocer. Según ha adelantado El Periódico, uno de los empleados de este local de ocio se dirigió a la comisaría de los Mossos D'Esquadra el 19 de agosto de 2017, pocas horas después de los atentados.
En su declaración, el hombre, que trabajaba como cajero del establecimiento, explicó que el grupo estaba formado por cuatro o cinco personas. «Cuando abandonaron el local, vi que uno de los individuos llevaba en el pantalón un cuchillo. Estaba oculto por el jersey, pero lo vi», añadió. El hombre también aseguró en los agentes que «como máximo» los hechos habían sucedido «cinco días antes de los atentados».
Pocos días después, el 17 de agosto, uno de los terroristas, Younes Abouyaaouqub, se dirigiría a las Ramblas de Barcelona donde, con una furgoneta alquilada, atropellaría mortalmente a 14 personas, dejaría centenares de heridos y mataría otra persona durante su huida. Aquella misma noche, el resto del grupo atentaría en Cambrils, provocando una víctima mortal. En total, 16 personas murieron, seis terroristas fueron abatidos y dos más murieron en la explosión de la casa de Alcanar.
Bombonas del Wallapop
En la vivienda del Montsià había una gran cantidad de material explosivo y bombonas (un total de 106), parte de las cuales fueron adquiridas a través de Wallapop, comprándolas a particulares de la zona límite entre Cataluña y la Comunidad Valenciana. Entre los escombros de las casas, los investigadores pudieron descubrir un teléfono móvil. Sospechan que era propiedad de Hichamy, aunque lo utilizaban otros miembros. Se había activado en julio y tenía como única finalidad hacer buscas sobre fabricación de explosivos y también se había descargado la aplicación Wallapop, que permite compras y ventas de particulares a través de Internet.
Por otra parte, en Alcanar, los investigadores también encontraron documentación diversa, entre la que destaca el pedido por parte de Said Ibn Aizza, uno de los detenidos días después en Vinaròs, de una docena de bidones de veinte litros –240 litros en total– de peróxido de hidrógeno. La hizo pocos días antes del atentado, el 27 de julio, en la empresa La industrial Jabonera, con sede en Tortosa.
Este componente se utiliza normalmente en la industria como sustitutivo del cloro o de la lejía, pero es también habitual en la fabricación de explosivos. El peróxido de hidrógeno fue uno de los principales ingredientes de las bombas del 11-M en los trenes de Madrid y también en la bomba del metro de Londres del año 2005.
Para financiar la compra de los elementos necesarios para crear los explosivos, varios miembros de la célula terrorista del 17-A pidieron, un mes antes de los atentados, créditos rápidos utilizando nombres falsos. Así lo apunta la Comisaría General de Información de los Mossos D'Esquadra en un informe, que figura al sumario de la investigación. Concretamente, los terroristas habrían tenido contacto con las financieras Cofidis, Moneyman.es y DineroRapido.
Entrevistas policiales al imán
Con respecto al imán de Ripoll y cerebro de los atentados de Barcelona y Cambrils, Abdelbaki Es Satty, mantuvo cuatro «entrevistas policiales» en el centro penitenciario Castellón I, donde cumplía condena por tráfico de drogas. Fueron entre los meses de abril y junio de 2012 y la última el 17 de marzo de 2014, un mes antes que abandonara la prisión. Así consta en un informe elaborado por Instituciones Penitenciarias (que depende del Ministerio del Interior) a petición del juez que investiga los atentados, Fernando Andreu.
Consta, también el número de identificación de los agentes. Dos de ellos tienen letra al principio (propio de la Guardia Civil) y dos más no (habitual a la policía española). Son datos facilitados al juez Andreu por Instituciones Penitenciarias. Poco después de salir en libertad, el año 2015, Es Satty llegó en Ripoll y ejerció como imán para la comunidad musulmana Annour, situada en la calle Progrés. A la causa también se incluye un informe de Instituciones Penitenciarias de la Generalitat donde se deja constancia que Se Satty nunca había sido recluido en ningún centro de Cataluña.
Perdón a su familia
El sumario también incluye un informe de los Mossos d'Esquadra donde se detalla el registro del domicilio de Ripoll donde residían Said Aalla, uno de los terroristas abatidos en Cambrils, y su hermano Mohamed, que fue detenido poco después para acabar dejándolo en libertad. En el documento se refleja que los agentes de la policía catalana encontraron en la habitación de Said Aalla una «carta de despido» dirigida a su familia y donde pide disculpas por lo que pensaba hacer, y que los Mossos creen que «pone de manifiesto la certeza absoluta que iba a morir de manera inminente». «Si me sobreviene la muerte, os dejo una nota para la familia. Os pido perdón a todos por las molestias que os he causado, sobre todo a los padres y especialmente a mi madre», dice la nota, dónde también añade que tienen que ser sus progenitores los que gestionen la venta de sus pertenencias para conseguir dinero.
Las discotecas, objetivos
Los terroristas del 17-A cogieron como inspiración el atentado del 2015 en la sala Bataclan, en París, y fijaron como posibles objetivos discotecas y festivales de Barcelona y Benicàssim (Castellón). Lo evidencian las numerosas búsquedas que realizaron por Internet de varios locales de ocio y festivales y que los Mossos D'Esquadra recogen en un informe que se encuentra en el sumario. Entre las búsquedas hay locales como Razzmataz, Pachá y Badgad. «Las discotecas gay de Sitges (Garraf)» y «Las discotecas gay Sitges, la mayor» fueron sus siguientes consultas en la red.
Alarma por un disfraz
La última alarma relacionada con el caso se levantó el pasado mes de febrero, cuando el día 7 un hermano de Younes Abouyaaqoub, el terrorista de las Ramblas, compró un disfraz de policía. A partir de aquel momento, se lo sometió a un seguimiento por amenaza de atentado, coincidiendo con carnaval, unos hecho que no se consumó, por lo cual, la vigilancia estuvo vigente hasta el 17 de febrero.