El Arzobispado anuncia el inicio de la reparación de la Iglesia de Constantí

El Arzobispado de Tarragona tiene previsto inciar, en los próximos días, las obras de actuación de urgencia para reparar y reforzar el techo y la cubierta de la Iglesia Parroquial de Sant Feliu, según informaba ayer el Ayuntamiento de Constantí. El pasado mes de abril se produjo el hundimiento de la cubierta y una parte del techo de la Iglesia, que se encuentra cerrada al culto desde marzo de 2016 por motivos de seguridad.

Según informaron el servicios técnicos del Arzobispado en el consitori constantienc, la actuación constará de diferentes fases. La primera de ellas consistirá en reforzar y asegurar el resto de la cubierta del templo, con la instalación de diez vigas o andamios con soporte metálico, teniendo en cuenta que muchas de las vigas actuales se encuentran en un adelantado estado de deterioro.

Una suma de causas

El hundimiento parcial del techo de la iglesia de Sant Feliu de Constantí (Tarragonès), ocurrido la noche del 16 de abril de este año, se debió a una «suma de causas», según el primer diagnóstico que realizó el arquitecto Enric Casanovas.

Entre los factores que habrían incidido directamente en los desórdenes estaría la afectación estructural de las grietas que ya obligaron a cerrar el templo el culto ahora hace dos años. También, las deformaciones estructurales que sufre el edificio desde el 2011 en sus muros con fisuras y desplomes, las cuales han provocado pequeños desplazamientos de andamios. Además, entonces ya se señaló a algún elemento de apoyo de madera podrido en los muros como el factor que habría podido contribuir a la quiebra de la estructura y a la caída de la cubierta sostenida. A pesar de todo, el colapso producido no llegó al 10% de la cubierta y no afectó al corazón de la edificación, según los técnicos.

Sin la iglesia abierta al público desde hace dos años, los actos religiosos se distribuyen entre el centro parroquial y el pabellón polideportivo del municipio de Constantí.