Experiencia piloto promovida por Repsol para medir y gestionar la calidad del aire en el Camp de Tarragona
Los primeros resultados, dl último año, indican que todos los parámetros mesurados están por debajo de los mínimos establecidos
Se oye|siente un fuerte ruido en el Polígono Norte a causa de una parada|puesto en Repsol Química
La empresa Repsol, ha impulsado una experiencia piloto para medir los componentes volátiles orgánicos y hacer un seguimiento constante de la calidad del aire en el Camp de Tarragona. La experiencia se ha llevado a cabo con la participación técnica del EURECAT y del Instituto Cerdà, y ha permitido aplicar y comprobar la validez de una nueva metodología que se pondrá al servicio y se cederá libremente a todos a los agentes implicados en la gestión de la calidad del aire y especialmente en los ayuntamientos interesados.
Durante un año entero y a través de 20 medidores rotativos y la técnica de la cromatografía, se ha podido visualizar la calidad del aire en todo el ámbito del Camp de Tarragona. En esta primera fase del trabajo, que se cerrará a final de año, ya se ha hecho un seguimiento exhaustivo de los niveles de butadieno y los resultados, según explican desde la compañía energética, «indican cantidades no relevantes muy alejadas de las referencias disponibles, especialmente allí donde se había concentrado el foco de preocupación cómo es el caso de los ayuntamientos de Constantí y el Morell».
Los resultados provisionales del estudio se han presentado este viernes en la Mesa de la Calidad del Aire del Camp de Tarragona. Según explica Repsol, la nueva metodología permite incorporar el análisis de tantos componentes orgánicos volátiles como se quiera.
