El centro, el Camp de Tarragona y el área de Barcelona lideran el crecimiento de Cataluña

Las comarcas centrales, el área metropolitana de Barcelona y el Camp de Tarragona son las zonas que han liderado el crecimiento de la economía catalana durante el año 2017 gracias, principalmente, a la expansión de la industria y de los servicios, cosa que ha permitido superar la crisis.

El catedrático de Economía Josep Oliver ha presentado hoy los resultados del Anuario Económico Comarcal 2018 de BBVA en lo que destaca que las comarcas que más crecieron en el 2017 fueron la comarcas centrales, 3,6%, el área metropolitana de Barcelona, 3,4% y el Camp de Tarragona, 3,6%.

Según Oliver, si somos capaces de alargar el crecimiento, este seguirá por el resto del territorio, como ya ha pasado otras veces.

Las comarcas cuya economía creció más en el 2017 fueron el Vallès Occidental (5,1%), el Bages y Osona (4,2%) y Baix Penedès, Maresme y Cerdanya, con un 4% cada una, y las que menos, Ribera d'Ebre, un 0,5% y el Solsonès, un 0,9%.

Por demarcaciones, la fortaleza de la industria y de los servicios vinculados a ella, impulsaron el crecimiento de Barcelona, 3,4%, Tarragona, 3,3%, mientras que Gerona y Lérida crecieron menos, un 2,9% y un 2,6% respectivamente.

Los datos del anuario muestran, según Oliver, que la crisis está superada porque Cataluña «ha hecho los deberes» y, en el 2017, la comunidad creció con fuerza especialmente en exportación, que registró récords históricos, y muestra mejoras en la competitividad.

También ayudaron factores exteriores como la política monetaria expansiva del Banc Central Europeu, la contención en el precio del petróleo o que durante el año pasado España y Cataluña se beneficiaron turísticamente de la situación política del mediterráneo.

De hecho, Oliver ha destacado que el crecimiento del 3,4% en el 2017 fue el «más sólido» de los cuatro ejercicios que hace que tenemos de crecimiento, y todo eso, aunque en el mes de agosto y octubre Cataluña sufrió los atentados terroristas y la crisis política.

El delegado territorial de BBVA en Cataluña, Christian Terribas, también ha destacado que Cataluña está haciendo los deberes y ha pasado la crisis más fuerte de los últimos años «con nota» porque hay una «recuperación económica evidente» favorecida por las exportaciones.

Oliver ha afirmado que, globalmente, en el 2017 se produjo un «crecimiento sólido» y se registró una composición del crecimiento «atractivo» ya que Cataluña está cambiando su modelo productivo, con mucha más vinculación en el exterior y con crecimientos de servicios de alto valor añadido, entre otras cosas.

Ha destacado que el crecimiento es más lento en términos ocupacionales pero que también «es más sólido» con un componente tecnológico más elevado y mano de obra más calificada.

Según Oliver, Cataluña ha recuperado en cuatro años el 50% del ocupación perdido durante la crisis y cree que podrían faltar unos tres años para recuperar la ocupación del 2007, que era un «máximo histórico insólito».

Sobre el 2018 se ha mostrado «moderadamente optimista», a pesar de la moderación global por las guerras comerciales, el aumento del precio del petróleo y un menor crecimiento de China, entre otros factores externos.

Ha recordado que las últimas previsiones de la Comisión Europea apuntan a un crecimiento de la economía española del 2% en el 2020 y ha dicho que cree que Cataluña tiene un «plus» de crecimiento sobre España, que podría llegar a situarse en el 2,2 o el 2,3% si no hay alguna «vicisitud» política o afecta a la situación de Italia esperamos que todo el mundo tenga 'juicio'», ha dicho.

Sus previsiones destacan que este año las exportaciones catalanas frenarán un poco, porque Europa ha crecido mucho, aunque seguirán aumentando, y los servicios turísticos se normalizarán por las mejoras de las condiciones políticas de países como Túnez, Egipto y Turquía.

En general, no cree que la composición del crecimiento se altere especialmente, aunque quizás la demanda interna crezca un poco más.