La consulta ginecológica en Cambrils se hace sin auxiliar y con un ecógrafo obsoleto

Sólo pasan consulta ginecológica dos mañanas a la semana. Lo hacen sin auxiliar y con un ecógrafo «que ha quedado obsoleto» y que falla constantemente. Estas son las condiciones en que trabaja el equipo de la ASSIR (la unidad de Atención a la Salud Sexual y Reproductiva) en el Hospital Lleuger de Cambrils desde hace cuatro años aproximadamente y que denuncia la delegada sindical de USITAC y una de las dos ginecólogas que pasan consulta, Elisabet Segura.

Según la delegada sindical, la situación es «insostenible» y supone un agravio para las mujeres del municipio, no sólo por la reducción de horas de consulta, sino también por las condiciones en las que tienen que atender a las pacientes.

Según los datos del Instituto de Estadística de Cataluña a fecha de 2017, Cambrils tiene un padrón de 32.855 personas, 16.956 de las cuales son mujeres. La demanda de este servicio, por lo tanto, es muy grande y «las listas de espera se alargan: tienen que esperar cuatro meses para una visita de ginecología», dice Segura.

«Ahora hace cuatro años, aproximadamente, pasamos de ofrecer atención ginecológica cada día a sólo dos mañanas a la semana (martes y viernes). No sólo eso, sacaron al auxiliar y el ecógrafo con el que se trabaja ha quedado completamente obsoleto. No hay ningún ASSIR de Cataluña donde los profesionales pasen consulta sin auxiliar», denuncia Segura. Asegura que el Hospital Lleuger de Cambrils pone a disposición de los profesionales de este servicio a una auxiliar que está trabajando en la consulta dentista. Cuando tienen que realizar algún procedimiento, la pueden llamar y, cuando acaba el trabajo que está haciendo, entonces puede prestar su ayuda a la consulta ginecológica. La delegada de USITAC afirma que esta dinámica «no es viable y no podemos disponer realmente de su ayuda». Recuerda, por otra parte, que la ginecológica es una consulta donde se practican muchos procedimientos microquirúrgicos, muchos de los cuales, las profesionales tienen que hacer en solitario, algo que, según Segura, «no es seguro ni para el médico ni para la paciente».

A esta situación se suma el hecho de que tienen que trabajar con un ecógrafo que, según asegura, ha quedado «obsoleto, falla y se tiene que abrir y cerrar constantemente». Las ginecólogas tienen que hacer lo imposible para realizar las ecografías –una prueba habitual en cualquier consulta ginecológica– y no siempre con un resultado satisfactorio. Esperan que la promesa de que podrán disponer de un ecógrafo nuevo el próximo año se cumpla pero, mientras tanto, han pasado cuatro años y siguen trabajando con lo mismo.

Elisabet Segura afirma que han ido salvando la situación pero no avistan ninguna señal que haya intención de solucionar los problemas. «La gente aguanta un poco, al principio crees que es una cosa transitoria, pero eso es insostenible, no se puede tolerar. Hace falta que las pacientes conozcan cuál es el problema real», añade la delegada sindical de USITAC.

Un agravio para las pacientes

La reducción de horas de consulta en la ASSIR del Hospital Lleuger de Cambrils hace, por otra parte, que algunas pacientes tengan que ser derivadas en Reus. Las dos mañanas de consulta permiten atender en torno a 48 pacientes semanales, 24 por cada ginecólogo, aproximadamente, una cifra que, según USITAC, no cubre el alta demanda. Cuando se llenan las agendas, algunos pacientes tienen que ser derivados en Reus, pero considero que no hay derecho que ningún paciente tenga que desplazarse a otra ciudad para ser atendida. Esta situación provoca desigualdades entre pacientes», añade Segura. «Se ofrece una atención muy próxima a la paciente. Aparte de las cuestiones ginecológicas, se ofrece un servicio integral a la mujer, se intenta que pueda conseguir una atención rápida, pero así es imposible», explica.

La unidad Atención a la Salud Sexual y Reproductiva (ASSIR) es un servicio que depende del Instituto Catalán de la Salud (Generalidad) que, en el caso de Cambrils, se presta al Hospital Lleuger Antoni de Gimbernat del grupo Sagessa.

La respuesta del ICS

Ante la situación denunciada por USITAC, el ICS recuerda que, en el caso de Cambrils, la atención sanitaria depende de dos proveedores. El ICS traslada al personal para las consultas, pero el equipamiento, los recursos materiales y el personal de apoyo depende del grupo Sagessa.

Por otra parte, fuentes del ICS afirman que, cada 4 o 5 años, se renuevan todos los ecógrafos y que, en el caso del de Cambrils, así se hará. El actual, afirma el ICS, no es el último modelo, pero funciona correctamente.