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Sanidad

Cerca de 4.000 pacientes derivados en Barcelona por pruebas del PET en 5 años

El aparato de tomografía por emisión de positrones del Hospital Sant Joan, de Reus, todavía no está a pleno rendimiento aunque funciona desde hace meses

Imatge d'una PET similar a la que hi ha a l'Hospital Sant Joan, de Reus, des de fa sis anys.

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Entre el año 2014 y el mes de agosto del 2018 fueron derivados a Barcelona 3.722 pacientes de la Región Sanitaria Camp de Tarragona para ser sometidos a pruebas en una PET –tomografía por emisión de positrones–, cuando resulta que hacía seis años que había uno en el Hospital Sant Joan, de Reus. No fue hasta el pasado mes de julio que la PET de Reus empezó a recibir pacientes de Tarragona, y a estas alturas todavía no ha llegado a funcionar a pleno rendimiento.

En el 2014 fueron derivados en Barcelona para pasar la prueba de la PET un total de 578 pacientes. La cifra fue en aumento los años siguiente, siendo de 716 en el 2015, 860 el 2016 y 970 en el 2017. Este año, hasta el mes de agosto, han sido derivados 598 pacientes. Estos datos los ha ofrecido el Gobierno de la Generalitat en respuesta a sendas preguntas parlamentarias presentadas por Ciudadanos a propuesta de la Plataforma por una sanidad pública de calidad en Tarragona que encabeza Ángel Juárez, presidente de la Coordinadora de Entidades de Tarragona.

En la respuesta a la pregunta parlamentaria, el Gobierno recordó que «el 26 de febrero de 2018 se firmó una alianza estratégica entre el Hospital Sant Joan, de Reus, y la empresa pública Instituto de Diagnóstico por la Imagen (IDI), para la mejora de la accesibilidad de los pacientes de la Región Sanitaria Campo de Tarragona que necesitaban una prueba PET». El acuerdo «permite que pacientes» de la citada región sanitaria «sean atendidos en Reus y no necesariamente sean derivados en centros hospitalarios de Barcelona, si no está clínicamente indicado».

Juárez, quién antes de conocer la existencia de una PET en el centro hospitalario de Reus reclamó dotar de un aparato de estas características en el Hospital a Joan XXIII para evitar que pacientes de Tarragona fueran derivados a Barcelona, manifestó ayer a esta redacción que «sigo pensando que tendría que abrirse un expediente informativo para saber porque se han derivado miles de pacientes cuándo había una PET en las comarcas tarraconenses, con todo lo que eso supone de molestias al enfermo y de gastos económicos». «Sigo pensando que se tiene que investigar qué pasó y quién pudo resultar beneficiado», remarcó el presidente de la Plataforma.

El aparato PET de Reus se está utilizando de manera progresiva «y todavía no ha llegado a un funcionamiento del cien por cien, por lo cual todavía hoy se derivan pacientes en Barcelona». «Pedimos que sólo se hagan si lo especifica un cuadro técnico y no por decisión facultativa, cosa que es diferente», subrayó.

Por otra parte, Juárez añadió que «preguntaremos al Gobierno cuando| la PET de Reus estará a pleno rendimiento y cuál es su capacidad total y cuántos pacientes pueden hacer la prueba cada año».

El pasado julio, el IDI informó de que «ya se derivan enfermos de Tarragona en Reus» para ser sometidos a la PET. El IDI afirmó por aquellas fechas que «es cierto que se derivaban a Barcelona, porque la PET del hospital de Reus era gestionada por Sagesa, afectada por un concurso de acreedores». Como consecuencia de este hecho, el IDI «se hizo cargo del servicio que ofrece la PET». En este contexto, Juárez dijo ayer que «si el de Reus funciona a pleno rendimiento, no hace falta que pongan una en Tarragona».

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