Ecologistas en acción denuncia que el escape de Vandellòs II ha pasado al mismo sistema de lo que hace nueve meses
La entidad vuelve a pedir que no se renueve el permiso de explotación de la central nuclear, que expira en julio del 2020
Ecologistas en acción denuncia que el escape detectado el martes en la central nuclear de Vandellòs II afecta al circuito primario de refrigeración, el mismo elemento clave para la seguridad que en la del 8 de abril pasado. Según el portavoz de la entidad, Francisco Castejón, la aparición de un nuevo escape «es alarmante porque, o bien no se reparó bien, o bien las inspecciones realizadas no fueron suficientes». Ante esta situación, Ecogolistas en acción cree que la central no se tiene que volver a poner en funcionamiento hasta que no se conozca el motivo de este nuevo escape y se tomen las medidas para que no se repita. Además, la entidad vuelve a pedir que no se renueve el permiso de explotación de la central, que expira en julio del 2020.
Según recuerda la organización ecologista en un comunicado, el escape está por debajo de las Especificaciones Técnicas de Funcionamiento (ETF), ya que se han detectado 19 litros por hora y el límite es de 227. A pesar de todo, la entidad dice que eso no resta gravedad al incidente porque se ha producido en el mismo lugar que en la que del abril pasado.
Ecologistas en acción añade que el circuito afectado es clave porque extrae el calor del reactor y, sin este proceso, «aumentaría la temperatura del reactor hasta producirse la fusión del núcleo, tal como pasó en los accidentes de Harrisburg (1979), Chernobil (1986) o Fukushima (2011)». La entidad subraya la importancia de no permitir ningún escape, dado que eso puede ser indicio de una ruptura próxima del circuito.
La organización denuncia que, aunque el escape del abril pasado tendría que haber motivado «la parada inmediata» de la central, ni los operadores ni el Consejo de Seguridad Nuclear lo creyeron necesario. Eso motivó una denuncia que fue aceptada por la fiscalía «dado que se tiene que parar la central cuando se detecta un escape de la barrera de presión» y, finalmente, «se paró la central para proceder a la recarga y se supone que se reparó el escape», añade el comunicado.
ANAV y el CSN aseguran que el incidente no ha tenido consecuencias ni para las personas ni el medio
Este martes, la central nuclear Vandellòs II inició la secuencia de parada no programada después de la detección de este escape al sistema de refrigeración del reactor. El CSN apuntó que los sistemas de seguridad de la planta habían funcionado «en todo momento en la forma prevista de su diseño». La empresa titular de la planta atómica, ANAV, notificó hacia las dos menos cuarto del mediodía el incidente.
Según el comunicado difundido por la sociedad gestora, los técnicos observaron un pequeño incremento de caudal del agua recogida en los sumideros del edificio de contención. Con el objetivo de facilitar que se dieran las condiciones adecuadas para permitir el acceso al interior del edificio y caracterizar el escape así como determinar las acciones posteriores, se llevó la planta a modo 3 -espera caliente.
De acuerdo con el CSN y ANAV, el incidente no ha tenido consecuencias para las personas ni el Medio Ambiente y ha sido clasificado como nivel 0 preliminar en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares y Radiológicos (INES).