Los educadores se movilizan para reclamar más derechos laborales
Una cincuentena de trabajadores de la demaración se reunieron en una asamblea en Torreforta
La llegada masiva de menores extranjeros no acompañados (MENA) a Cataluña en los últimos dos años tensa el sistema de protección de la Dirección General de Atención a la Infancia la Adolescencia (DGAIA), que se hace cargo de estos chicos hasta que alcanzan la mayoría de edad. Los educadores que trabajan con estos jóvenes cada día denuncian situaciones de centros sobre ocupados, agresiones y problemas de impago por parte de la DGAIA. Con el objetivo de poner en común esta problemática, una cincuentena de educadores del Camp de Tarragona se reunieron en una asamblea el pasado 14 de diciembre en el centro cívico de Torreforta.
«Hacemos un trabajo muy importante, que a veces es invisible», comenta uno de los educadores que impulsó este grupo, que no quiere dar su nombre por miedo a represalias. Este educador asegura que la «conflictividad» en los centros va en aumento y que en algunas entidades se producen atrasos de hasta 15 días en los pagos del sueldo. El 80% de los centros de primera acogida donde viven estos chicos son gestionados por entidades y fundaciones privadas. «La excusa siempre es la misma. Nos dicen: 'La Generalitat no me paga y no te puedo pagar'», explica. En una mañana, educadores de Tarragona, Reus y otros municipios de la demarcación consiguieron reunir a 300 trabajadores en un grupo de WhatsApp. Los educadores trabajan en servicios muy diferentes. «Somos una figura muy transversal. Tenemos horarios muy diversos, condiciones muy diferentes y estamos muy fragmentados», señala.
Una de las propuestas que surgió en la asamblea es que haya una estructura con representantes de diferentes servicios», afirma este trabajador. Después de las fiestas navideñas tienen previsto organizar una segunda asamblea. La organización de los educadores coincide con la negociación del convenio colectivo entre trabajadores, empresas y Generalitat. «Queremos que vean que el sector está movilizado y hacer presión para negociar el convenio», añade este hombre, que denuncia también la apertura de centros sin personal calificado para hacer el trabajo.
Entre las reclamaciones destaca la equiparación salarial y de condiciones laborales entre los educadores que trabajan directamente para la DGAIA y los que lo hacen en centros privados.