Sanidad
Valls pide una inversión millonaria para los edificios de Pius Hospital
Las instalaciones quedarán pequeñas y obsoletas en diez años, según la dirección del centro que plantea hacer nuevos espacios
Pius Hospital de Valls advierte que, en un horizonte de entre 10 y 15 años, el recinto quedará pequeño y obsoleto. Desde el Consejo de Administración de Pius se evita hablar de hacer a un hospital nuevo y que dice ahora el objetivo es negociar con el CatSalut las posibles líneas de mejora de todo el complejo, especialmente del centro sòcio-sanitari que ocupa un edificio histórico de más de cien años. Para hacer frente a este nuevo escenario el centro hospitalario plantea una inversión millonaria, de entre 15 y 20 millones de euros. Mientras, se van remodelando espacios internos, como las nuevas consultas de otorrinolaringología y oftalmología que ahora disponen del doble de espacio a la planta baja, con el objetivo de mejorar la atención asistencial de los 62.000 habitantes que atiende, de los municipios del Alt Camp y la Conca de Barberà.
En concreto, el equipo de otorrinolaringología ha atendido a unos 4.500 pacientes durante el año pasado, una cifra que aumentó respecto del año anterior en buena parte por la incorporación de profesionales del Hospital Joan XXIII -ahora también se añadirán progresivamente a oftalmología. «Eso incrementa en un 30% la capacidad asistencial», afirma a la gerente del hospital, Noemí Nieto. «Permite hacer más visitas y más cirugía, y eso quiere decir que la lista de espera se reduce significativamente», constata el doctor Alfred Sans Saez, coordinador de la unidad. En concreto, las intervenciones han incrementado hasta las 135, cuando un año antes no llegaban al centenar.
De los 300.000 euros invertidos en las nuevas consultas, que duplican espacio y ahora ocupan unos 300 metros cuadrados, buena parte se han destinado a equipar el área de oftalmología y ampliar la cartera de servicios. Así, se podrá atender la degeneración macular de la retina (DMAE). «Y los pacientes, que son personas mayores, no se tendrán que desplazar porque tendrán el mismo tratamiento que se hace en Joan XXIII», destaca Luís Velasco, coordinador del servicio. Se tratarán también otras problemáticas de la retina, como oclusiones, etc. De hecho, en el equipo se se incorporará un especialista de la retina. «Lo estábamos esperando porque era una necesidad, es un importante avance», ha añadido Velasco.
Proyectos de futuro y demandas sindicales
Desde Pius, sin embargo, se remarca que, más allá de mejoras puntuales que se vienen haciendo en el centro hospitalario -como el bloque quirúrgico, en la segunda planta del hospital o al área de diagnóstico por la imagen-, estas no resuelven un problema mayor que presentará en un futuro el complejo, que es la falta de espacio y el envejecimiento de los edificios, sobre todo donde está el centro sociosanitario -que ocupa un antiguo convento. Sin embargo, el hospital de agudos también ya ronda los treinta años de historia. El presidente del Consejo de Administración, Martí Barberà, ha reconocido que hay conversaciones con la Generalitat para encauzar el futuro de Pius. En paralelo, también se trabaja para incrementar el acuerdo del concierto con el Cat Salut.
Barberà ha reconocido que hace falta poner fin al «agravio comparativo» que sufren los trabajadores de Pius -se les congelaron las DPO, una parte del sueldo variable- y se quiere reunir con todos los representantes sindicales. Por su parte, desde la CGT, sindicato mayoritario al comité, no se confía en las buenas palabras y se remiten a hechos. «Continuamos en precariedad laboral, la dirección intenta evitar los contratos indefinidos y la promoción interna de los administrativos, que ya hemos denunciado, así como la jubilación parcial con relevo», ha manifestado Marisa Cañón, portavoz de la CGT. El sindicato evaluará si emprende acciones después de la próxima reunión del comité y con la dirección -el 30 y 31 de enero, respectivamente.