Policial
Doce detenidos de una red relacionada con el robo de 100 toneladas de cobre
A los detenidos se les imputan 82 robos en varias provincias, entre ellas, Tarragona
La Guardia Civil ha desarticulado una organización criminal muy activa relacionada con el robo de más de cien toneladas de cable de cobre en instalaciones agrícolas, plantas solares y vías ferroviarias de una decena de provincias, y ha detenido a doce personas, de las cuales siete han ingresado en la prisión.
Además, se han emitido órdenes de detención de nueve personas más que formarían parte de esta red, en la que se le imputan 82 robos en las provincias de Sevilla, Córdoba, Cádiz, Huelva, Jaén, Málaga, Badajoz, Ciudad Real, Castellón y Tarragona.
La Operación Silver Sun se inició en abril del año pasado a raíz de una serie de robos de cable de cobre en la Sierra Norte de Sevilla, similares a otros cometidos en Sevilla, Córdoba y Cádiz, y se sospechó de un grupo de personas de nacionalidad rumana.
La organización se dividía en dos grupos, cada integrante con un rol asignado y un alto grado de especialización, y viajaban cada día en instalaciones diferentes y provincias alejadas unas de otros.
La red captaba imágenes vía satélite de las instalaciones susceptibles de tener grandes cantidades de cobre, seleccionaban una y viajaban de noche en vehículos que cambiaban cada mes aproximadamente para eludir controles.
El primer día iban hasta el lugar elegido y hacían saltar las alarmas para comprobar el tiempo de reacción de la vigilancia privada y los cuerpos de seguridad en la zona.
En un segundo día realizaban una «cata de cable», para verificar si era de bastante calidad, y en una tercera jornada entraban en la instalación, se ocultaban esperando que las patrullas determinaran que sólo había sido un intento de robo y después volvían y sustraían grandes cantidades de cobre, con casos de tres toneladas.
El cable de cobre se llevaba a un chatarrería clandestina situada en la provincia de Sevilla y después el chatarrero lo transportaba a una finca situada a unos cinco kilómetros en la periferia de la capital andaluza, donde se ocultaba hasta sumar seis u ocho toneladas y llevarlo en camiones a una empresa mayorista.
Los robos, que han causado grandes pérdidas económicas en plantas fotovoltaicas de empresas eléctricas, dejaron a veces sin suministro eléctrico grandes zonas y localidades.
También han sido perjudicados las comunidades de regantes del valle inferior del Guadalquivir, que llegaron a sufrir un robo el año pasado con pérdidas de más de 28 millones de euros, y Adif, con robos de varios millones de euros en vías ferroviarias y almacenes.
A final de febrero, cuando los dos grupos estaban robando en dos plantas fotovoltaicas de Almodóvar del Río (Córdoba), se estableció un dispositivo por carretera que permitió detenerles, mientras que al día siguiente se detuvo a cinco personas más, entre ellas al chatarrero.
La operación ha sido llevada a cabo por el equipo Roca de la Rinconada (Sevilla), en colaboración con las compañías de Córdoba y de Cádiz.