ERC vuelve a plantear un gobierno de concentración en Montblanc
Josep Andreu: «El ascenso de JxCat me ha sorprendido»
El republicano Josep Andreu, el alcalde en funciones de Montblanc, extiende la mano a un nuevo gobierno de concentración, una fórmula que ya aplicó durante el mandato 2011-2015, con la idea de hacer frente común ante la situación política entre Cataluña y España. En estas elecciones municipales, ERC ha aguantado la mayoría absoluta por los pelos, después de doce años de alcaldía ininterrumpida ganando con comodidad. Andreu ha reconocido haberle sorprendido el crecimiento de JxCat -que ha saltado de 425 a 1.350 votos-, la cual ha felicitado por sus buenos resultados. «Eso demuestra que somos una villa y una comarca eminentemente nacionalista», ha manifestado. Este será el último mandato de Andreu. En una entrevista con la ACN, dice que dedicará todos sus esfuerzos a dejar el mejor relevo. También desvela su papel en la Crida.
Andreu asegura estar satisfecho de los resultados del 26-M en que ERC ha ganado a la mayoría absoluta -7 de los 13 concejales en juego al consistorio montblanquí-, a pesar de perder apoyo. Con 5 concejales, JxCat, la segunda fuerza más votada, ha acortado notoriamente distancias. En el 2015 se encontraba a más de 1.200 votos de diferencia de ERC, la misma cifra que ahora aproximadamente ha obtenido en cantidad de votos. De hecho, aplicando la ley D'Hondt, JxCat se ha quedado a sólo una veintena de votos de arrebatársele a un concejal a ERC y empatar a 6. Un escenario que habría dejado al PSC, que ha vuelto al Ayuntamiento con 1 concejal, con la clave de la gobernabilidad.
«Este crecimiento tan grande de JxCat no entraba en mis cálculos», ha dicho Andreu. Es por eso que ha extendido la mano a Marc Vinya, candidato de Junts per Montblanc, para hacer un gobierno de unidad, incluyendo también al PSC. Parece, sin embargo, que Junts, consciente de haber sido capaz de captar a un electorado que no se movilizaba, quiere marcar perfil propio para ser alternativa dentro de cuatro años. En todo caso, hasta el momento, según Vinya, su formación no ha recibido ninguna propuesta formal por parte del grupo de ERC. «Si no hay un gobierno de unidad, procuraré llevar los acuerdos tan lejos como podamos o haciendo acuerdos programáticos en proyectos concretos», ha añadido Andreu.
El relevo de Andreu
El relevo de Andreu supondrá la transición de un gobierno muy personalista a una nueva generación. «Yo aspiro a dejar un equipo todavía mejor que el que yo he encabezado y en eso dedicaré todos mis esfuerzos», manifiesta Andreu. Algunas voces apuntan que incluso podría terminar a medio mandato para dar paso a alguien mes joven. Lo más previsible es que sea un estrecho colaborador de Andreu, Francesc Benet, actual primer teniente de alcalde, que ha compaginado este cargo con la presidencia del Consell Comarcal de la Conca de Barberà.
En esta legislatura la única polémica se ha originado por el proyecto fallido de una piscina cubierta. Andreu garantiza que se acabará haciendo. En su último mandato, el alcalde en funciones, sin embargo, dice que el caballo de batalla será la pérdida de habitantes en la comarca y la política de vivienda. Andreu también batallará por el tema patrimonial y cultural. La liberación de las murallas ha sido su acción de gobierno más destacada. La actuación más reciente ha sido el derribo de una antigua una casa solariega para posibilitar la recuperación de la torre y el portal de Sant Francesc.
El futuro en la Crida
Andreu también ha estado en el punto de mira para posicionar muy claramente a favor de la operación de la Crida de Carles Puigdemont y para abogar por la unidad del independentismo, hasta el punto que la dirección de ERC le advirtió que el partido no permite la doble militancia. Según Andreu, su partido es ERC, aunque forme parte de la Crida. «Si la Crida es un espacio unitario de transversalidad y de confluencia, participaré, pero si se va hacia un partido político que se presenta a elecciones o un lobby de JxCat, entonces yo no estaré», sentencia.