Cultura
Promueven una ruta por las obras más singulares de Jujol en el Camp de Tarragona
El circuito, ideado por la URV, recorre dieciséis edificios con el objetivo de difundir el arquitecto tarraconense y discípulo de Gaudí
La Universitat Rovira i Virgili (URV), del brazo con la Diputació de Tarragona, promueve una ruta turística por los dieciséis espacios más emblemáticos del arquitecto tarraconense Josep Maria Jujol, repartidos por todo el Camp de Tarragona. Si bien incluye el Teatre Metropol de Tarragona y la Casa Bofarull dels Pallaresos, la mayoría son pequeñas iglesias en pueblos del Alt y Baix Camp, el Baix Penedès y el Tarragonès. La URV cree que la obra de Jujol, considerado uno de los discípulos de Gaudí, es muy más valorada en Barcelona que a su tierra natal. Con el objetivo de difundir y al mismo tiempo preservar este patrimonio, en buena parte desconocido para el público, la Universitat plantea este circuito, bautizado como 'Terrritori Jujol', que ya se difunde a través de una web. El visitante podrá sellar una cartilla cada vez que visite uno de los espacios. Es factible de completar la ruta en dos días. En una segunda fase se planteará la opción de hacerla a pie o en bicicleta.
El Teatre Metropolde Tarragona, la Casa Bofarull de losPallaresos, la iglesia del Sagrat Cor deVistabellao la ermita de la Mare de Déu del Roser de Vallmoll son algunas de las obras deJujolque conforman la ruta. La mayoría son iglesias o sienes propiedad del Arzobispado, pero también hay edificios públicos y otros de privados, un «guirigay» que al visitante le supondrá el esfuerzo extra de tener que trucar con antelación y acordar la apertura del espacio, puesto que la inmensa mayoría permanecen cerrados.
«Es una ruta sencilla de hacer, pero pide implicación de quien la hace, se tiene que ser activo», explica Roger Miralles, profesor de la Escuela de Arquitectura (ETSA)de la URV. Es el impulsor de esta iniciativa, financiada por la Diputació. La ruta unifica y amplía una información sobre estas equipaciones que hasta ahora era exigua y dispersa. De momento la conforman dieciséis espacios, pero el objetivo de los impulsores es ampliar el circuito. En el Camp de Tarragona hay una septuagésima de obras deJujol.
Un legado poco valorado, fuera del despacho de arquitectura
La mayoría de intervenciones en el Camp de Tarragona, pero, son desconocidas y, en muchos casos, están desprotegidas. Según Miralles, la obra deJujola Tarragona no ha disfrutado de la notoriedad que se le ha otorgado a Barcelona. El profesor lo atribuye al hecho que es fruto de momentos «relajados», fuera del despacho de arquitectura, que a menudoJujolhacía de balde o por amistad, y que por eso no se le ha concedido suficiente valor.
El dibujo de un pato para señalizar la ruta
Un esbozo deJujol, una forma amorfa que representa el dibujo de un pato, ha servido para señalizar las obras que conforman la ruta ‘Territori Jujol’. Cada uno de los espacios se señaliza con un fragmento de este dibujo del 1908 -el original lo conserva el hijo deJujola su archivo. La natura tiene un gran pes en la ruta. «No se puede entender la arquitectura deJujolsin el paisaje del Camp de Tarragona», concluye Miralles.