Nutrición
El consumo de lácteos puede disminuir el riesgo de desarrollar cáncer colorrectal
Un informe de la URV sugiere que una dieta con productos derivados de la leche puede disminuir un 20% el riesgo de sufrir este tipo de cáncer
Según un estudio realizado en la Unidad de Nutrición Humana de la URV, el consumo de leche y de productos derivados se relaciona con la disminución del riesgo de desarrollar cualquier tipo de cáncer colorrectal.
El análisis se ha realizado a partir de 29 artículos (15 estudios de cohortes poblacionales y 14 estudios de casos y controles) que incluyen más de 22.000 casos de esta enfermedad.
La URV ha concluido que, en comparación con un consumo bajo, el consumo más elevado de lácteos se vincula a una disminución del riesgo en un 20%. En el caso de la leche (entera, desnatada y semidesnatada), un consumo alto se asoció a un 18% menos de riesgo en cualquier parte del cuerpo, incluyendo el colon y el recto.
El calcio contenido en estos productos ha sido uno de los potenciales elementos que explicarían la reducción del riesgo de sufrir este tipo de cáncer, ya que ejerce efectos antitumorales. Además, otros componentes naturalmente presentes en este productos como el ácido butírico, la lactoferrina, el ácido linoleico conjugado y la vitamina D también podrían tener un efecto protector.
Según explica el Diari Digital de la universidad, el año 2016, hubo 1,7 millones de casos incidentes de cáncer de colon y recto, con más de 830.000 muertes en el ámbito mundial. En los próximos 15 años, se prevé que la prevalencia global de cáncer colorrectal incremente un 60% y cause 1,1 millones de muertes.
Un último informe liderado por el organismo internacional World Cancer Research Fund / American Institute for Cancer Research (WCRF/AICR) también ha llegado a la misma conclusión. No obstante, el riesgo de sufrir este tipo de cáncer en relación a los subtipos de lácteos (yogur, queso, leche fermentada...), así como diferentes versiones de otros productos teniendo en cuenta su contenido en grasa (lácteos desnatados, semidesnatados o enteros) no está del todo claro.
El estudio, publicado en la revista Advances in Nutrition ha sido llevado a cabo por la investigadora predoctoral Laura Barrubés y lo ha dirigido la investigadora Nancy Babio profesora agregada del Departamento de Bioquímica y Biotecnología de la Universidad Rovira y Virgilio e investigadora adscrita al Centro de Investigación Biomédica en Red de la Fisiopatologia de l'Obesitat y Nutrición (CIBERobn) y por el catedrático Jordi Salas, director de la Unidad de Nutrición Humana del Departamento de Bioquímica y Biotecnología de la URV, director Clínico de Nutrición del Servicio de Medicina Interna del Hospital Universitario de Sant Joan de Reus, investigador principal CIBERobn, y ambos miembros del Instituto de Investigación Sanitaria Pere y Virgilio (IISPV).