Atentados de Barcelona y Cambrils
El CNI fichó Es Satty en el 2014 a cambio de no deportarlo y lo ayudó a ser imán en Ripoll
Desde marzo del 2012 recibió visitas de la Guardia Civil y del centro de inteligencia en la prisión de Ceuta donde cumplía pena por narcotráfico, según 'Público'
Miembros del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) ficharon el año 2014 Abdelbaki Es Satty, presunto cerebro de los atentados de Barcelona y Cambrils del 17 de agosto del 2017. Lo hicieron a cambio de no deportarlo, y posteriormente lo ayudaron a convertirse en el imán de Ripoll. Es lo que saca a la luz Público en la tercera entrega de la investigación sobre la relación que mantenían Es Satty y el CNI. El año 2010 se lo detuvo mientras conducía una furgoneta con 136 kilos de hachís que quería embarcar en el ferry Ceuta- Algeciras y alegó que lo había tenido que hacer por las amenazas de un grupo islamista. Eso, según Público, despertó el interés del CNI por captarlo como informador.
El medio digital publica partes de un informe confidencial facilitado a los cuerpos policiales los días posteriores a los atentados en que se resumía lo que se sabía de Es Satty. Se indica que en la prisión de Castellón, donde cumplía cuatro años de condena por narcotráfico, Instituciones Penitenciarias lo consideraba islamista radical, así como líder secundario de otro preso llamado Abdellatif Sif, con quien ejercía tareas de proselitismo entre el resto de internos musulmanes.
En marzo del 2012, sin embargo, es trasladado a Ceuta para asistir a juicio, y cuando vuelve, según indicaría la documentación reservada a la que ha tenido acceso Público, muestra un cambio de actitud muy pronunciado, con un perfil bajo que podría haber sido motivado por el temor a ser expulsado en Marruecos.
Este cambio de actitud hizo crecer el interés de los servicios de inteligencia españoles para captarlo como confidente, asegura el rotativo digital, y el 5 de abril del mismo año Es Satty recibió la primera visita de la Guardia Civil. Público afirma que fuentes del CNI le han revelado que el año 2014, poco antes de ser puesto en libertad, se cerró un acuerdo con él para que hiciera de confidente a cambio de no deportarlo.
A la salida de la prisión, la subdelegación del gobierno de Castellón decidió deportarlo, pero sus abogados recurrieron la decisión y el juzgado consideró que el delito no suponía amenaza ni para el orden público ni para la seguridad ciudadana. Además, el juez consideró que tenía «arraigo laboral» porque la defensa presentó un contrato de trabajo en vigor y un certificado de vida laboral que acreditaba que Es Satty llevaba más de seis años y medio dado de alta en la Seguridad Social. Público pone en cuestión el origen de esta documentación.
El rotativo afirma que en todo este litigio recibió ayuda «extraoficial», y añade que las mismas fuentes del CNI aseguran que el servicio de inteligencia «arregló las recomendaciones y avales» que permitieron a Es Satty ser admitido como imán a Ripoll. La idea era que desde allí se pudiera infiltrar en redes yihadistas europeas, asegura Público.
El mismo rotativo afirma que el cerebro de los atentados de Barcelona y Cambrils ya había colaborado con las fuerzas de seguridad el año 2005, en el marco de una operación infructuosa que investigaba las conexiones entre los atentados en Casablanca en el 2003, la ayuda a terroristas huidos de los atentados del 11-M y el ataque a una base de Carabinieri italianos en Nasiriya, en Irak.
Varias informaciones, según el rotativo, vinculaban a Es Satty con el islamismo radical, e incluso la Policía Nacional pidió permiso al entonces juez de la Audiencia Nacional y hoy ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, para pincharle el teléfono, pero un mes después se solicitó parar a las escuchas argumentando que no tenía ninguna actividad, y que seguramente utilizaba otro terminal.
El rotativo llega a la conclusión de que las fuerzas de seguridad toman esta decisión porque Es Satty ya colaboraba como informante privilegiado, dado que acudía a las reuniones de estos grupos radicales.
El CNI escuchaba los móviles de los terroristas del 17-A cinco días antes de los ataques
El cerebro de los atentados de Barcelona y Cambrils fue confindent del CNI hasta el 17-A