El sector turístico espera una ocupación en torno al 90% en la costa este agosto

El sector turístico espera una ocupación en torno al 90% en los destinos de costa durante agosto, el mes más fuerte de las vacaciones de verano. En las comarcas de Tarragona, los hoteleros alertan de que la temporada no será «para tirar cohetes» y firman acabar con las cifras del año pasado, con un 90%. La Federació Empresarial d'Hostaleria i Turisme de Tarragona (FEHT) lo atribuye al crecimiento de Turquía y al repunte de Egipto y Túnez. En cambio, en el Maresme prevén cifras similares a la del 2018, con ocupaciones del 93% y una recuperación del turista ruso, mientras que en Sitges del 90% después de que el año pasado no se llegara. Con respecto a las comarcas centrales el ritmo de reservas era muy positivo, con más de un 75% a finales de julio, y en el Pirineo de Lérida calculan llegar a cifras próximas a la plena ocupación, después de un julio marcado, en el caso de las comarcas del Alto Pirineo por los efectos de la cancelación del Doctor Music Festival. En las comarcas gerundenses, el 70% de los hoteleros confían repetir los números del año pasado. El resto, sin embargo, no son tan optimistas. En la demarcación, sobre todo, los picos de ocupación se prevén registrar al litoral y durante la primera quincena de agosto. Por toda la Costa Brava, los hoteles llenarán entre el 85 y el 90% de las camas.

En la demarcación de Tarragona los empresarios se muestran prudentes y apuntan que puede haber una ligera bajada del ocupación. «Los datos que tenemos hasta ahora nos dicen que no será una temporada para tirar cohetes», explica Eduard Farriol, presidente de la Federació Empresarial d'Hostaleria i Turisme de Tarragona (FEHT). Farriol cree que es un verano «difícil» y firma acabar con las cifras del año pasado, que considera que no fue una mala temporada.

La valoración la hace de manera conjunta por las tres áreas turísticas de la demarcación: la Costa Daurada, la zona de interior y las Terres de l'Ebre. De todos modos reconoce que la que menos sufre es la Costa Daurada porque recibe turistas de más países diferentes, cosa que hace que si falla un mercado, se note menos.

Con todo apunta que las reservas se están haciendo fuerza a última hora y espera que eso ayude a que las cifras de agosto se mantengan. Como es habitual, los principales mercados son el catalán y el español, seguidos del británico, el francés y el ruso. Desde la FEHT, el ligero descenso que prevén en parte lo atribuyen al crecimiento turístico de Turquía, pero también al pespunte de Túnez y Egipto. La demarcación de Tarragona el año pasado recibió a 6 millones de turistas, que hicieron 20 millones de pernoctaciones.