Empresarios de Calafell alertan de que el 'top manta' está cada vez más organizado

«No sé si hay más vendedores de top manta en Calafell, lo que sí que sabemos es que cada vez están mejor organizados». Esta es la opinión de un comerciante de Calafell compartida por la mayoría. Los empresarios de este municipio no saben a ciencia cierta si el número de vendedores ilegales ha aumentado después de que la policía haya apretado el asedio al top manta en Barcelona, pero siguen observando el fenómeno con preocupación, sobre todo después de que un grupo de manteros se enfrentaran en un grupo de Mossos d'Esquadra el viernes pasado por la noche. En cualquier caso, la percepción que tienen es que cada vez hay más volumen de vendedores. «Se ha producido el efecto llamamiento porque se ha tratado la problemática con permisividad durante mucho tiempo. Se ha notado el incremento», dice José Soriano, presidente de la asociación Fòrum Calafell.

«Es un problema mucho enquistado, hace muchos años que lo sufrimos. Cada vez se los ve con más bolsas por la calle, que funcionan en bloque y lo tienen todo muy bien controlados. El tipo de producto que venden es cada vez más diverso y, además, se actualizan. Si ahora es moda un determinado producto o marca, enseguida lo ponen en venta. Tienen una logística muy bien organizada», explica Luis del Fresno, quien regenta Sports Doña Amparo, una de las tiendas veteranas de la localidad. «Eso no se improvisa. Eso de tener ochenta vendedores en la calle a la misma hora, con los mismos carros, es algo que está muy organizado», sostiene Soriano.

La noche del pasado viernes un grupo de Mossos d'Esquadra se acercó a un grupo de vendedores que quería instalar sus puestos en la zona del Puerto de Segur. Cuando los agentes se acercaron para instarlos abandonar la zona, según la versión de testigos, los vendedores mostraron una actitud beligerante contra la policía. En esta zona, donde se celebraba la fiesta mayor a buen seguro de Calafell, estaba prevista una fiesta con música al aire libre. «Según parece, la policía les dijo que no podían ponerse allí por un tema de seguridad, porque se preveía la asistencia de muchísima gente», explican. Los Mossos mostraron una actitud de contingencia pasiva y evitaron el enfrentamiento con el grupo de vendedores que se enfrentó con los carros alzados contra los agentes, tal como se puede apreciar en los vídeos gravados por varios testigos y que han circulado por las redes sociales.

Miquel Pujante, secretario de la agrupación Fórum Calafell, que agrupa asociados comerciantes, empresarios hostaleros y de servicios de los diferentes núcleos de Calafell explica que la entidad se reunirá con los responsables de Comercio y Seguridad del municipio con el fin de abordar la problemática e intentar evitar que vuelva a repetirse un episodio como el del viernes por la noche. «Ahora ya todo está hecho, el mes de agosto está en curso, pero hablaremos con el Ayuntamiento y la policía para tratar esta cuestión y el hecho de que haya menos vigilancia. Los comercios han sufrido más robos», dice Soriano.

«No estamos seguros de que haya más vendedores, pero ahora están más horas, se cambian de sitio, la sensación que tenemos es que la actividad se ha intensificado mucho y no deja de ser competencia desleal. Nosotros tenemos que pedir permisos para organizar cualquier cosa, ellos van y se instalan en el paseo, sin pedir nada,» dice Pujante. «Todos tenemos intereses en la playa, al fin y al cabo, si se pierde la reputación en la zona, todos perdemos», añade.

Los empresarios afirman que el nivel de organización de este tipo de venta ilegal es cada vez más sofisticada en el municipio. Aseguran que es habitual ver cómo descargan abarrotes de productos de furgonetas en sitios concretos del municipio. «Sabemos que la policía está actuando pero más a escala de investigación, y se ha reducido el número de efectivos para combatir el fenómeno a Barcelona, pero aquí también hacen falta, hay comercios que están mucho quemados», apunta Pujante. El pasado 28 de junio, un dispositivo conjunto de la Policía Local de Calafell y los Mossos d'Esquadra permitió decomisar una gran cantidad de material ilegal que los manteros ponían en venta en la zona del mercado semana de la calle Baixador de Segur de Calafell. A pesar de las actuaciones puntuales, el número de vendedores de top manta sigue siendo numeroso en varias zonas del litoral de los núcleos de Calafell.

«Evidentemente, este fenómeno ha hecho descender las ventas a muchos comercios y afecta la calidad de lo que se vende», apunta a Del Fresno. «La gente que compra en eltop manta tiene que tener claro que lo que está provocando es perjudicar el comercio local y es perjudicial a los jóvenes: si no funcionan los negocios, no se puede contratar más personal. No es bueno para la sociedad tener actividades ilegales», concluye Soriano.