Piden reabrir el caso por la muerte de un mantero durante una operación policial en Salou en el 2015

La familia de Mor Sylla, el hombre senegalés que murió en agosto del 2015 en Salou durante una operación policial contra el top manta, ha pedido al juzgado de instrucción número 4 de Tarragona que reabra el caso por la vía penal. Su abogado, Ramon Setó, ha explicado que la petición se basa en las contradicciones existentes sobre la hora de inicio de la intervención de los Mossos d'Esquadra. El escrito, que se presentó el martes, relata que la orden judicial autorizaba la entrada en el piso de Salou a partir de las seis de la mañana. Hasta ahora los agentes que han declarado en el proceso judicial han dicho que intervinieron a esta hora, pero según ha revelado el abogado el jefe del dispositivo admitió en mayo al TSJC -donde se lleva a cabo un proceso contencioso paralelo por la vía administrativa- que la intervención se produjo antes, alrededor de las cinco.

Eso, según la familia, supone una «nueva prueba» que tendría que permitir reabrir el caso. «No es un hecho anecdótico, sino que genera serias dudas de la credibilidad de toda la versión policial. El hermano sólo quiere saber la verdad. Vemos que hay cosas oscuras y queremos que se aclaren», ha señalado Setó este miércoles en Tarragona, en una rueda de prensa con el hermano del difunto, Ibrahima Sylla.

Mor Sylla murió el 11 de agosto en el marco de un dispositivo de los Mossos D'Esquadra contra el top manta. El octubre pasado la Audiencia de Tarragona ratificó que el hombre se precipitó por el balcón de su casa cuando pretendía huir de los agentes y mantuvo el archivo. El juzgado de instrucción ya consideró que la muerte era accidental y que no se podía atribuir a la acción de ningún efectivo policial.

Por el contrario, el hermano del hombre, Ibrahima Sylla, sospecha que sí que hubo una interacción directa entre los Mossos y Mor Sylla. Se encontraba rezando en el balcón y se pensaban que estaría todo el mundo durmiendo. Fue una intervención desproporcionada y malísima. Movilizaron trece agentes para un piso de 40 metros cuadrados, como si fueran a buscar terroristas o a una organización criminal», ha lamentado.

El hermano también ha criticado que los compañeros de piso de MuereSylla, también senegaleses, «no hayan colaborado» y que aquellos que sostuvieron a los medios que los Mossos lo habían lanzado de arriba del balcón, después lo negaran ante el juez. Además,Ibrahimaha asegurado que la versión policial es «un montaje» porque se basa en unos testigos protegidos «falsos», entre los cuales hay, ha dicho, un trabajador del Ayuntamiento de Salou y un «colaborador de la policía».

Ibrahimaha considerado que la muerte de su hermano «se podría haber evitado» porque para detenerlo o entrar al piso no había que hacer una intervención de estas características. A la vez, el hermano del hombre ha criticado que solo declararan ante el juez los cuatro últimos agentes que entraron al inmueble. «Queremos que salga la verdad porque su hija pueda saber qué pasó realmente con la muerte», ha cerrado.