Escritor e historiador
Cultura
«Las gladiadoras existieron, su espectáculo era más técnico y elegante»
El escritor presentará, este jueves en la librería Adserà, ‘Naumaquia’ su segunda novela ambientada a Roma
Una esclava que vivirá todo un periplo hasta convertirse en la mejor gladiadora del imperio Romano. Una civilización que vive su máximo esplendor con la inauguración del Anfiteatro, el año 80 d.c. Un emperador que promulga cien días de juegos y cortejos para mostrar al pueblo, su poder y una puesta en escena impresionante a través de un espectáculo: la Naumàquia, una descomunal representación de combates navales que se hacían en la antigua Roma por diversión. Todos estos son los ingredientes de la nueva novela de Jordi Nogués, leridano de Artesa de Segre, que desde hace años reside en Valls y que vive, actualmente, su mejor momento creativo. Este jueves, día 3 de octubre, (19h) presenta en la librería Adserà su segunda novela histórica ambientada en el imperio romano, de la editorial Hispano Americana (Edhasa).
—Su novela tiene coma protagonista una gladiadora, ¿existieron de verdad?
— Sí, esta es la primera vez que una novela habla de las gladiadoras, es una novedad absoluta y sí, existieron y en Neumaquia se explica la historia de una de ellas.
—¿Cuál es el hilo argumental de esta novela?
— La novela tiene tres ejes argumentales, la naumàquia: la batalla naval entendida como espectáculo que se hace al mismo Colliseum; el segundo eje es los aurigas, eran unas facciones que combatían, cada facción representaba una clase social de Roma. El tercer eje argumental son las gladiadoras que es un tema fascinante.
—Explíqueme un poco, ¿cuál es la base histórica de esta figura femenina?
— Me encontré con que hay referencias documentales, pero cuando buscamos referencias visuales, sólo encontré dos piezas. Un relieve y una escultura. El relieve de Halicarnas y el otro una estatua de bronce en un museo de Hamburgo. Las mujeres salen con los pechos descubiertos y por eso encontré dos interpretaciones. La primera que eran unos espectáculos eróticos y la segunda, que es la que investigué con la ayuda de arqueólogos y expertos, corroboró que efectivamente eran gladiadoras igual que los hombres.
—¿No ha trascendido la imagen de la gladiadora o ‘gladiatrix’?
— Era muy poco habitual, eran mujeres esclavas que habían sido capturadas. La mayoría de ellas eran prostituidas pero estas tenían que luchar. Los espectáculos de gladiadora era un espectáculo de lujo, se caracterizaba por ser más técnico, más pulcro. Parece que las mujeres aprendían mejor la técnica, no era tan físico como los hombres y sus movimientos eran más elegantes.
—¿Y morían en la pista también?
— Las mujeres eran un espectáculo minoritario, había ,uy pocas, eran muy caras de contratar. No acostumbraban a morir porque eran profesionales, iban mucho con cuidado, y sólo lo hacían si lo pedía el público.
—Hábleme de la protagonista
— Se llama Kella, una chica bereber, que está en un oasis en el norte de África, proviene de una tribu donde está muy marcado el rol femenino y el rol masculino. Y ella, quiere ser cazadora no quedarse en casa, es una mujer fibrada y alta, físicamente imponente. Será capturada como esclava y pasará todo un periplo hasta que llega a una escuela de gladiadoras. Kella es de aquellas personas que no encaja y se plantea qué hace en este mundo. Y finalmente, se siente encajada cuando acaba haciendo de gladiadora.
—Hay un gran componente feminista en esta novela, ¿como se vive esta lucha en una época que era un mundo dirigido por hombres?
— Creo que los historiadores han destacado la historia desde el punto de vista masculino, pero estoy convencido que había igualmente mujeres avanzadas, fuertes y transgresoras como hay ahora. Era una sociedad machista, es cierto, pero se ha acentuado porque los historiadores han explicado sólo una parte de la historia de la época.
—Naumaquia es su segunda novela ambientada en la época romana, ¿es una segunda parte?
— Sí es la segunda novela, la primera fue Colosseum (2016), que explica cómo se construyó el Coliseum de Roma, con la historia de Calicrates, un arquitecto de origen griego y la princesa judía Julia Berenice, un liberto muy rico que lo tiene todo pero busca la felicidad. Entre los dos se establece una relación especial. Es una obra más filosófica y reflexiva. Las dos novelas son independientes pero forman un conjunto. Naumaquia es una obra con mucha adrenalina, una historia de pura pasión, con un ritmo narrativo intenso, no te da tregua durante todo el rato. Estoy seguro de que el lector no se aburrirá.