Nuclear
El Síndic interviene para exigir la renovación de los planes de emergencia nuclear en la zona de Ascó y Vandellòs
El borrador del informe señala las carencias tecnológicas y de las carreteros de evacuación
El Síndic de Greuges ha presentado el borrador del informe que elabora sobre las carencias de los planes de emergencia nuclear (PENTA) a los alcaldes de la zona de influencia de las centrales nucleares de Ascó y Vandellòs. Rafel Ribó ha comprobado en persona los problemas de evacuación que se podrían vivir y las carencias tecnológicas que todavía hay en la zona, como puntos negros sin cobertura de telefonía móvil. El Síndic ha dado un plazo de diez días para que los ayuntamientos acaben de trasladarle las sugerencias y demandas que recogerá el informe así como propuestas y reclamaciones de entidades y particulares. El informe definitivo se hará llegar al Ministerio del Interior, a la Generalitat y al Defensor de Pueblo Español.
Antes de la reunión con una cuarentena de alcaldes, el Síndic de Greuges ha visitado la estación de clasificación y descontaminación (ECD) de Maials, la escuela de Ascó y el centro de emergencia nuclear de Vinebre. Allí ha podido comprobar algunas de las deficiencias del PENTA y de los planes municipales que denuncian a los alcaldes. «Le hemos enseñado que tenemos las pastillas de yodo en el Ayuntamiento porque sería más fácil repartirlas allí o que las emisoras de los avisos de la subdelegación del gobierno español hoy no iban», ha explicado Gemma Carim, alcaldesa de Vinebre y presidenta del Consell Comarcal de la Ribera d'Ebre. «¡Tenemos dosímetros renovados pero atrévete a abrir uno! Necesitamos saber cómo funciona si lo tenemos que explicar a la población. Nos ofrecen una formación online una vez a la legislatura pero no es suficiente. Tenemos que hablar del día a día», ha reclamado.
Justamente una mejor coordinación entre administraciones es uno de los principales ejes de las reclamaciones que incluye el borrador del informe sobre los planes de emergencia nuclear que está redactando el Síndic de Greuges. Ribó ha agradecido la predisposición de los entes locales a colaborar y se ha comprometido a dirigir, pronto, las recomendaciones a las instituciones y empresas responsables. «La situación es de mucha desatención. No hay una auténtica coordinación entre las administraciones, hace falta más implicación del gobierno central en coordinación del gobierno de la Generalitat. Hace falta uno encontrada de todas las administraciones», ha denunciado el Síndic.
«Todo eso se reduce con un solo principio: el presupuesto tiene que ser mucho más importante para la zona de emergencia nuclear. La dotación presupuestaria es hoy casi un insulto», ha denunciado Ribó. Los recursos que reclama el Síndic servirían para la formación de agentes y la dotación de medios, para mejorar las comunicaciones –todavía hay muchos puntos negros de cobertura de telefonía móvil, como la carretera que une Flix y Maials-, así como la mejora de la red ferroviaria y las carreteras.
La presidenta del Consell Comarcal de la Ribera d'Ebre ha recordado que las carreteras están preparadas por una hipotética evacuación en un radio de 10 kilómetros pero la inversión no abarca más allá de este perímetro. Carim ha lamentado que se siga posponiendo el desdoblamiento de la carretera C-12 aunque es la única vía de evacuación de la zona de Ascó. «Es una vergüenza y no quiero pensar que pasaría si tuviéramos que salir todos al mismo tiempo y tuviera que entrar el personal que mueve una emergencia. Podría ser un caos», ha sentenciado. En las carreteras se suma la también «caótica» línea ferroviaria R-15 que cruza la zona norte del Ebro. «No se entiende. Tenemos 3 centrales nucleares en un radio de 50 kilómetros y no es un capricho de la gente que vive aquí», ha añadido Carim.
«Hace falta que rehagan el PENTA y los planes de cada municipio y que cumplan los requisitos de seguridad que se exigen dentro de las centrales. Es un contrasentido que seamos muy cuidadosos con la emergencia que pueda haber dentro y no nos damos cuenta de que la emergencia de fuera está desatendida», ha señalado el Síndic. «Necesitamos gente profesional que nos forme y nos coordine pero es vital que se haga una profesionalización de la zona y que continuamente se hable de esta cuestión. Hace falta una mesa de debate sobre las carencias que pueda haber. No pidamos más que los derechos que ya tenemos como ciudadanos», ha pedido la presidenta de la Ribera d'Ebre.