Lo más normal es ser diferente

Con el lema La diferencia marca tendencia , este miércoles el Centro Cultural de Valls acogerá la tercera edición del Desfile por las capacidades. Se trata de un desfile de moda protagonizado por chicos y chicas procedentes del Servicio Ocupacional de Inserción (SOI) de la Fundación Ginac, que trabaja en la formación para la inserción laboral de personas con diversidad funcional, y del SIEI (Apoyo Intensivo para la Escolarización Inclusiva) del ins Narcís Oller de Valls.

Esta acción se enmarca en la Semana de las capacidades, que ya hace siete años que se celebra en la ciudad de Valls. La impulsora del desfile y responsable del SOI de la Fundación Ginac, Celeste Pujol, explica que la voluntad de la actividad es «conseguir una mirada diferente hacia las personas con diversidad funcional». Pujol apunta que, aunque principalmente se busca la sensibilización «también hay un punto muy importante de empoderamiento, porque los hacemos partícipes de todo, desde la elección de las canciones hasta las coreografías o la ropa que vestirán.»

Con la voluntad de profundizar en esta sensibilización, una parte del público que asiste al desfile está formado por niños y niñas de las escuelas de Valls. «Desde un principio trabajamos para que la iniciativa no fuera como una seta que salía sólo para mostrar personas diferentes, sino que quisimos todo tuviera un sentido y un contenido más allá de los centros participantes», señala Pujol.

Es por eso que también se realizan talleres en las escuelas, concretamente entre los alumnos de 5.º de primaria. Y, este año, como novedad, niños y niñas de dos escuelas -Eladi Homs y La Candela- desfilarán acompañando los jóvenes modelos del SOI Ginac y del SIEI de Narcís Oller. «La idea es que el desfile sea inclusivo con todo lo que eso implica, y eso se refuerza si desfilan personas con diversidad funcional», concluye la Celeste.

El Desfile por las capacidades se hace con la complicidad de muchas personas, que con su colaboración hacen que la pasarela de moda sea todo un espectáculo. Así, los trajes que lucen los modelos son cedidos por varias tiendas de la ciudad de Valls, mientras que los peinados son obra de la peluquería Bea, de Alcover, y el maquillaje es responsabilidad de profesionales procedentes de la Perfumería Pijuan y el Centro Sensaciones, también de Valls.

«Para los chicos y chicas esta actividad supone ser los máximos protagonistas, y no sólo aquel día, sino durante todo el proceso de preparación. Y al final el hecho de que todo el mundo les mire, que vayan vestidos elegantes, se sientan guapos, en definitiva, sean el centro de atención, también es muy importante», detalla Esther Blanes, educadora orientativa del SIEI de Narcís Oller. Los estudiantes que participan en el desfile son de tercero y cuarto curso de la ESO, y por eso algunos de sus alumnos repiten experiencia.

«El segundo año lo esperan con muchas ganas», asegura a la profesora, que también señala que acciones como estas son tan positivas para los jóvenes como para sus familias, «porque ven que son capaces de todo».