Vivienda
Tarragona revisará al alza el catastro de 2020
Se modificará el catastro en municipios del Montsià, la Ribera d'Ebre, el Baix Camp, el Tarragonès y la Conca de Barberà
Un total de 184 ayuntamientos catalanes, entre los que se encuentran Girona y Tarragona, han solicitado al Ministeri d'Hisenda revisar en el 2020 los valores catastrales de sus inmuebles urbanos, que son los que, sobre todo, sirven para aplicar el impuesto sobre bienes inmuebles (IBI). De estos 184 municipios catalanes, la revisión implicará subidas de los valores urbanos de entre el 3% y el 5% para un total de 182 de estos, ya que la anterior revisión se había realizado en fechas anteriores al 2011.
El Butlletí Oficial de l'Estat (BOE) publica este sábado la orden del Ministeri d'Hisenda que establece la relación de los 1.092 municipios de toda España que han solicitado revisar sus valores catastrales urbanos en el 2020. Entre estos hay 16 capitales de provincia. Los ayuntamientos pueden solicitar la actualización de sus valores siempre que hayan transcurrido al menos cinco años desde la entrada en vigor de los últimos valores catastrales. Los ayuntamientos que aparecen ahora en la orden ministerial la tuvieron que solicitar antes del 31 de julio pasado.
En Tarragona, se modificará el catastro de sitios como Alcanar (Montsià), Ascó (Ribera d'Ebre), Cambrils, Vandellòs y Reus (Baix Camp), Tarragona, Roda de Berà y Constantí (Tarragonès), la Espluga de Francolí y Montblanc (Conca de Barberà), o Valls.
Una subida de los valores catastrales implica un aumento de la base imponible sobre la cual cada ayuntamiento aplica su impuesto sobre bienes inmuebles (IBI). Si sube el valor catastral sube el IBI a no ser que el ayuntamiento decida neutralizar de alguna manera este efecto reduciendo el tipo impositivo (porcentaje) que se aplica sobre la base imponible para evitar el incremento de lo que pagan los propietarios. En la inversa, si baja el valor catastral, lo normal es que baje el IBI, a no ser que se modifique al alza el tipo impositivo que se aplica. En todo caso, los posibles efectos no se notan el año en que se realiza la actualización catastral, sino dos ejercicios después.
El BOE también publica el real decreto ley de medidas en materia tributaria, catastral y de Seguridad Social que establece cuánto tendrán que subir o bajar los nuevos valores catastrales en el 2020 en función del último año en que se revisaron. Para los 78 municipios españoles que ahora solicitan la actualización de unos valores cuya última revisión se realizó entre 1984 y 1988 el real decreto prevé un coeficiente de actualización de 1,05 que implica una subida del 5%. Para los 927 municipios que se sitúan en el intervalo entre 1989 y el 2003, se prevé un coeficiente de 1,03 (subida del 3%) y para los 87 ayuntamientos que revisaron sus valores catastrales por última vez entre el 2011 y el 2013 se prevé un coeficiente de 0,97 que implica una reducción del 3%.