Adif conectará la nueva variante ferroviaria de Vandellòs al corredor mediterráneo este fin de semana

Adif culminará la conexión de la variante ferroviaria de Vandellòs con el corredor mediterráneo este próximo fin de semana. Entre el viernes, a partir de las siete de la noche, y lunes, hasta las seis de la madrugada, los técnicos de la empresa estatal ejecutarán las últimas actuaciones para que pueda entrar en servicio el nuevo tramo a partir de este mismo día 13. Eso dejará fuera de servicio la vía única, que empieza al límite de los términos de la Ametlla de Mar y Hospitalet de l'Infant hasta Port Aventura. Las tareas para empalmar la variante con el trazado sur del corredor ya existente afectarán a un tramo de tres kilómetros. Eso obligará a interrumpir el servicio y a establecer un plan alternativo de transporte para garantizar la movilidad de los usuarios.

La actual vía única en servicio cruza las dos nueva vías generales que quedan situadas a los dos lados ya preparadas para el enlace. Durante la operación del próximo fin de semana, se desmontará esta vía única desplazándola parcialmente en sus extremos hasta completar la conexión de las dos vías. También hará falta desmontar un aparato de vía a la altura de Calafat y sustituirlo por tramos de vía general.

En total, la operación supondrá el montaje de vía y catenaria en cuatro zonas de enlace, de forma sucesiva con dos equipos y aportando la capa de balasto para que actúe la maquinaria de las operaciones de geometría de la vía. Una vez finalizadas estas tareas, un tren auscultador de Adif comprobará de forma dinámico el estado de la vía y la catenaria.

Durante el fin de semana se desmontará también la línea aérea de contacto existente y se trasladará y ajustará la previamente montada hasta su posición definitiva. Las operaciones en la catenaria se completarán con posterioridad a la puesta en servicio de la nueva variante, sin afectar al tráfico. Adif ha adaptado la subestación eléctrica de Vandellòs para dotar el tramo de una alimentación de 3.000 V.

Con la interrupción del paso de los trenes, se dará de baja el enclave de control del tráfico de Vandellòs y se actuará en las señales y circuitos de la vía en la zona de enlace para dar de alta el nuevo esquema. El telemando de este tramo será, como el resto, gestionado desde el Centro de Control del Tráfico de Valencia-Fuente de Sant Lluís.

De momento, el sistema de protección del tren será del tipo ASFA –anuncio de señales y frenazo automático- hasta el ámbito de Hospitalet de l'Infant, donde se pasará en ERTMS en su nivel 1. Una vez finalizadas las operaciones de enlace de la nueva variante, se iniciarán los trabajos para instalar este último sistema entre esta población y la Ametlla de Mar. Además, durante la semana posterior a la puesta en servicio, la vía tendrá una limitación temporal de velocidad hasta los 80 km/h para acabar de poner en servicio la nueva infraestructura con operaciones técnicas durante las noches. Durante el fin de semana del 17 al 19 de enero, Adif auscultará la vía con trenes laboratorios para garantizar el paso de convoyes a una velocidad máxima de 200 km/h a partir del lunes, 20 de enero.

Para garantizar la movilidad de los usuarios este próximo fin de semana, Renfe ha previsto un servicio alternativo de trenes de la línea R16 de Rodalies. Habrá un servicio alternativo por carretera entre la Ametlla de Mar y l'Hospitalet de l'Infant. Entre Tortosa y la Ametlla, los trenes circularán con modificaciones en el horario de salida para mantener los habituales del trayecto entre Hospitalet de l'Infant y Barcelona, que también se prestará en tren. Los servicios de larga distancia contarán también con un servicio alternativo por carretera entre la Aldea y Barcelona. En algunos casos no circularán, hecho que no generará afectaciones porque ya no se habían puesto billetes en venta.

La nueva variante ha supuesto una inversión de 700 millones de euros y prácticamente dos décadas de actuaciones. Inicialmente, el tramo de 64 kilómetros dispondrá de una doble vía con ancho ibérico hasta los cambistas de ancho de la Boella, y desde allí, con ancho internacional hasta la estación del Camp de Tarragona. Posteriormente se adaptará también al ancho internacional de forma coordinada con el resto de tramos. Aunque su puesta en marcha ha sido largamente reivindicada en el territorio, la eliminación de estaciones como Salou o la reducción de conexiones en las Terres de l'Ebre ha levantado fuertes críticas y anuncios de movilizaciones.