Valls celebra els Tres Tombs con casi 300 caballos y un centenar de carros
Los animales y los carruajes superan con maestría el «tomb del ayuntamiento»
Según el vicepresidente de la Societat de Sant Antoni, Marc Buqué, els Tres Tombs de Valls mezclan tradición y espectáculo y se diferencian de los que se hacen en otros pueblos porque el recorrido es más complicado. De hecho, uno de los reclamos es la emblemática bajada del Blat, ya que en este punto los carros cogen impulso para hacer las dos curvas. «Todo el mundo que viene a Valls sabe que está el quebradero de cabeza de los vuelcos, hay un poco de riesgo y chispa. Es un sitio de belleza plástica», ha valorado Buqué.
Por eso, las escaleras y el entorno de la plaça del Blatse llenan horas antes poraquellos que quieren coger el mejor sitio. En esta ocasión, el público ha aplaudido y ha animado a los participantes, la mayoría de los cuales han pasado con maestría, aunque uno de los carros grandes ha protagonizado un pequeño susto durante su paso. «Valls mezcla la destreza, la habilidad y el saber hacer de caballos y de arrieros», ha expresado el vicepresidente de Sant Antoni.
Como es habitual, los caballos y los carruajes tambiénhan marchado por varios puntos de interés, como la Font de la Manxa –donde un presentador ha relatado la historia de cada carruaje-, o por delante de la iglesia de Sant Antoni donde se ha hecho la bendición. Además, los visitantes también han apreciado la «joya de la corona» de entre todos los carruajes de la entidad. Se trata, según Buqué, de un carro de los años 50, 60 y 70 que sólo ha sido restaurado con barniz. «Es un carro totalmente original y auténtico que circulaba por Valls y que se conserva como el primer día», ha afirmado.
Protocolo para regular la fiesta tradicional
Con respecto a las protestas de los colectivos animalistas, Buqué ha defendido que los propietarios de los caballos son los primeros interesados en su bienestar. «Si les pasa alguna cosa somos los primeros a correr. Nosotros amamosy consentimos a los caballos», ha asegurado. Y en este sentido, ha argumentado que entrenan y salen con los animales antes de este acontecimiento. Por esta razón, ha explicado que los caballos están acostumbrados a los ruidos, las músicas, los cláxones o al griterío de la gente. Y ha añadido: «Antes sí que todo iba con menos control, pero hoy día todo el mundo tiene en orden las cartillas y la documentación».
Asimismo, ha destacado que la Federación Catalana dels Tres Tombs ha hecho un protocolo este año que establece que en cualquier concentración con animales tiene que haber puntos para beber agua, veterinarios y que no puede haber maltrato. Delante de eso, Buqué ha considerado que la fiesta no peligra.
Aparte, en esta edición también se ha consolidado la iniciativa impulsada por la Sociedad de Sant Antoni, los panaderos de Valls y la concejalía de Comercio y Turismo para recuperar el clásico roscón de Sant Antoni, ya que se han puesto en venta más de 400 roscones.