La organización de la Semana Medieval de Montblanc descarta trasladar los actos a julio o al otoño

El hecho de no saber como y cuando se levantarán las restricciones del estado de alarma, y las incertidumbres relacionadas con los ensayos previos, la concurrencia de público y el presupuesto, han llevado a la organización a descartar fechas alternativas como el 23 de julio -nueva fecha para el Día del Libro- o el otoño.

«El objetivo es balance cero, porque no somos una empresa. Por eso tenemos que encontrar el equilibrio entre todos los actos programados, ya que unos nos permiten pagar otros que son deficitarios», precisa López. Y eso, asegura, no se puede garantizar en las actuales circunstancias, como tampoco como se comportará la ciudadanía al mismo tiempo de asistir a los acontecimientos culturales.

Este año, la entidad ha recibido las subvenciones pendientes con importes menores y podrá cerrar el ejercicio económico sin dificultades. «Ha habido muy buena respuesta de las administraciones, de manera que la Asociación no quedará comprometida económicamente», señala López.

Semana Medieval en las redes sociales

Aunque no se ha podido celebrar la fiesta, se ha puesto en marcha varias iniciativas a través de las redes sociales. A modo de ejemplo, por Sant Jordi se hizo un llamamiento a vestirse de época medieval y la ciudadanía colgó fotografías en las redes También se ha mantenido el concurso de dibujo de las escuelas de la Conca de Barberà y el concurso de fotografías por Instagram, organizado por la oficina de Turismo.

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La cultura popular y tradicional no está tocada de muerte»

El paro de la actividad y de los acontecimientos culturales 'sine die' tiene un fuerte impacto en el sector. López apunta que la entidad afrontará dificultades para superar las consecuencias de la crisis sanitaria. Ahora bien, el presidente de la Asociación Medieval considera que la cultura popular y tradicional se repondrá. «La cultura popular no está tocada de muerte y, cuando todo eso pase, seremos de los primeros a meterle caña», afirma. «Somos el hermano pequeño, estamos muy acostumbrados a hacer cosas con cuatro duros y pocos recursos. Somos lo que somos gracias al voluntariado», añade.

Relevo de los miembros de la junta en septiembre

Otra de las preocupaciones de la entidad es la renovación de los miembros de la junta en una asamblea de socios prevista en septiembre que no saben si podrán hacer. Además, los nuevos responsables de la entidad tendrán que encarar la edición del próximo año con muchas incertidumbres. ¿«Quiénes garantiza que en el 2021 se podrán hacer acontecimientos multitudinarios con normalidad? Si se puede hacer, la gente se lo cogerá con unas ganas que hace muchos años que no hemos visto», vaticina López.