Hay que hacer una desescalada con mesura para no estresar al perro

Las mascotas también viven la pandemia de la COVID-19 y pueden sufrir repercusiones negativas por la situación personal de sus propietarios y la relación que han tenido con los animales durante el periodo de confinamiento y ahora con el proceso de desescalada. Cada mascota lo vive de una manera diferente. Los perros pueden sufrir estrés si el propietario ha vuelto al puesto de trabajo y, por lo tanto, pasa menos horas con el animal, mientras que gatos o conejos, para poner unos ejemplos, son más territoriales e incluso pueden agradecer que su cuidador no esté en casa.

Rebeca Carmona, responsable del área de comportamiento de Domingo Veterinaris, de Riudoms, explicó a esta redacción que, con relación a los perros, «antes de que se produzca el desconfinamiento del todo hay que dejarles un rato cerrados, como cuando son cachorros que se les tiene que enseñar a estar solos». Carmona también dijo que «es importante mantener la rutina, salir a la calle a las mismas horas porque los calma y, también, a la hora de jugar y darles la comida porque estarán más tranquilos». Carmona matizó que «se tienen que dejar unos ratos solamente, pero no como si fuera un castigo». El objetivo es volver a la normalidad que había antes de la pandemia, cuando el propietario pasaba muchas horas fuera de casa. El castigo se tiene que erradicar. «Se les tiene que aportar algún premio o juguetes como una que se pone comer dentro que va saliendo poco a poco: juegan y se calman», dijo.

En una vivienda donde durante muchas horas hay un elevado número de miembros de la familia como los niños, «se les tiene que dejar echar la siesta, que descansen, que es lo que hacen cuando están solos en casa». «El desconfinamiento del perro tiene que ser progresivo», añadió Carmona, quien destacó como comportamiento importante a tener en cuenta que «hay que evitar todo tipo de castigo para evitar que tengan más estrés» y «tienen que recibir premios si su conducta es positiva». La nueva situación en las comarcas de Tarragona por la aplicación de la Fase 1 contribuye a hacer una desescalada hasta ser punto suave.

Con respecto a salidas a la calle, Carmona recomienda que «sean largas porque los perros aprovechan para oler, práctica que los desestresa.» La veterinaria recalcó que «se tiene que evitar que los perros tengan contactos entre ellos» y recordó que, a consecuencia del estado de alarma, «todavía tienen que ir con correa».