Turismo
El sector turístico de Tarragona se muestra esperanzado al no tener pérdidas esta temporada
Los empresarios confían en la apertura del mercado internacional para salvar el verano
Destinación segura y consolidada
De momento, reservas tienen pocas, pero no es una situación que preocupe los empresarios. «Desde hace años que es siempre a última hora. No nos tenemos que poner nerviosos ahora; si tienen que llegar, llegarán», comenta. Además, la volatilidad de la crisis sanitaria obligará los establecimientos a ser «muy flexibles» para el qué hace a posibles cancelaciones, y destaca que lo importante este año «es que el cliente quede contento».
Una satisfacción que en buena medida vendrá dada por la seguridad sanitaria. «Será complicado que los hoteles trabajen con normalidad con tantas medidas, pero la ventaja es que en todas partes es igual. Si van a Grecia o Italia, pasará lomismo», indica. Por lo tanto, el hecho de que la Costa Daurada y las Terres de l'Ebresean destinaciones «conocidas» por toda Europa les juega a favor. «La gente que habitualmente viene, es muy posible que venga. Conoce los restaurantes, los supermercados, sabe como moverse, qué playas le gustan... es como estar en casa», valora.
Con respecto a los protocolos, se muestra satisfecho porque desde el gobierno estatal «se ha hecho caso al sector», especialmente por el hecho de que las medidas establecidas sean similares a las del resto de países de la Unión Europea. Ahora, la gran duda que todavía tienen, y que esperan resolver en los próximos días, es como podrán abrir las piscinas y como funcionarán los accesos a las playas. «Tenemos que aclararlo para poder transmitirlo, porque los mercados nos lo están preguntando», explica.
Finalmente, destaca la importancia que pueden tener este verano las segundas residencias para la hostelería. Guardià razona que «si antes una familia venía quince días y se guardaba quince más para ir en otro lugar, quizás este año pasa más días aquí y piensa que ya viajará el año que viene». De hecho, a día de hoy, el sector piensa en el 2021 como el año de la recuperación y confían en que «será normal». Eso les permitiría repetir los 22 millones de pernoctaciones y seis millones de turistas que han estado los últimos años.