Los campesinos auguran una caída del 50% de la cosecha de la avellana

Los campesinos del Campde Tarragona que se dedican a la producción de avellanas esperan con preocupación la cosecha de este año porque se producirán sólo la mitad de las que se producen en una cosecha normal. Así lo estima Rafael Español, responsable de Fruita Seca de Unió de Pagesos. «Una cosecha normal de avellanas está en torno a las 10.000 o 11.000 toneladas en el Campde Tarragona, que está donde se producen el 85% de las avellanas de Cataluña», indica Español, que añade que este 2020 no se recogerán más de 5.000 o 6.000 toneladas. En cambio, la del año pasado fue mejor del habitual, cuando se cogieron cerca de 14.000 toneladas.

Una mala polinización de los avellanos o las grandes ventoleras de2018 pueden ser las consecuencias de esta caída este año. Según Español, la de hace dos años fue la peor cosecha que ha visto en su vida. «Sólo se hizo un 20% de la producción e incluso hablé con campesinos de 90 años y tampoco habían visto ninguno tan mala», explica, y añade que después del mal tiempo los árboles se tienen que recuperar. «El año siguiente, en 2019, la cosecha fue mejor que los otros años y por eso este año no se harán tantas», comenta el pagés. En más, señala que con las lluvias de este invierno y el Glòria, los avellanos se han recuperado de estas afectaciones del 2018 y también puede ser que por este motivo lleven menos avellanas. «Ahora están muy bonitos y esperamos que esta recuperación sirva al menos para que el próximo año la cosecha vuelva a ser buena», dice Español.

Hace falta que los precios acompañen

Aunque la cosecha de este año no sea productiva, los campesinos esperan que los precios de la avellana acompañen para poder sacar el máximo beneficio posible. Turquía e Italia son los principales productores mundiales de avellanas y, según el miembro de Unió de Pagesos, tampoco están teniendo buenas cosechas. «En Turquía se comenta que el precio de la avellana será alto, pero aquí los comerciantes dicen que se mantendrá el precio de la temporada pasada, que es de 1,95 euros la libra. Esperamos que a la hora de abrir el mercado los precios vayan al alza, de la misma manera que en los otros», defiende Español, que destaca que en el país otomano se habla de 2,20 euros la libra. En este sentido, lamenta también que si el precio se mantiene, las pérdidas de los campesinos también caerán a la mitad de un año normal.

Por su parte, Joan Carles Gual, campesino de la Riera de Gaià que tiene cerca de 9 hectáreas de avellanos –lo que son unos 2.000 árboles aproximadamente– reconoce también que, si el precio no sube, la cosecha será complicada. «Por los costes que hay y las ganancias que tendremos, los números no nos saldrán», lamenta Gual. Finalmente remarca que el año pasado recogió cerca de 15.000 kilos «y este año haré 6.000 como mucho». En su caso la caída de la producción oscilará sobre el 60% con respecto a una cosecha habitual. «La gente que sólo dependa de la avellana no tendrá para pasar el año», dice el campesino rierenc.