Se disparan las fiestas en domicilios particulares en Roda de Berà

Las llamadas a la Policía Local de Roda de Berà con quejas de fiestas en domicilios particulares se han multiplicado este verano. El cuerpo policial se desplaza constantemente a viviendas para intentar averiguar si el ruido supera los límites permitidos y también lo hace en parques y zonas comunes, ya que también hay constancia de fiestas que están proliferando. Los llamados botellones.

Esta situación se ha hecho muy notoria en la zona de la playa del municipio de la Costa Daurada, un lugar donde, verano tras verano, visitantes de todos lugares deciden pasar parte o todas sus vacaciones, acompañados de amigos o de la familia.

El coronavirus ha provocado muchos cambios en la vida cotidiana de las personas, también en las que se marchan de casa en época de vacaciones. Uno de estos cambios es el hecho de trasladar la fiesta a casa, teniendo en cuenta que las discotecas están cerradas y que los locales de ocio o bares y restaurantes tienen un aforo más limitado y están obligados a abrir con medidas más restrictivas que las habituales.

Así lo justifica Pere Virgili, alcalde rodense, quién reconoce que «se ha producido un incremento de llamadas a la policía de vecinos que alertan de que el del lado tiene la música demasiado alta, grita mucho o habla muy fuerte. La gente ha perdido la paciencia». Esta situación se produce a «todas horas», aunque predomina por las noches. Virgili recuerda que «la Generalitat tomó la determinación de cerrar el ocio nocturno y parece que la gente ha decidido llevarse la fiesta a casa».

Decomisan alcohol

La Policía Local, según Virgili, está trabajando día y noche para atender estas quejas. «En ocasiones, llegan al lugar y no hay nadie y, en otros, sí que llaman la atención, tanto en casas particulares como en la calle», apunta el alcalde rodense.

Con respecto a los botellones, Virgili reconoce que algunos días «hay decomisos de alcohol en la calle, pero no son muy significativos». Por otra parte, a raíz del herido en punta de navaja hace algunas noches en la zona marítima de la localidad, Virgili es de la opinión que «es un caso aislado» y que «la inseguridad no ha crecido en el municipio» este verano.