Policial
Detenido en l'Hospitalet un fugitivo buscado por la justicia alemana por un homicidio
El hombre está condenado a cadena perpetua por disparar en ocho ocasiones a una persona en un restaurante en Alemania
La Policía Nacional ha detenido en Tarragona y Collado Villalba (Madrid) a dos fugitivos reclamados por la justicia alemana y colombiana, respectivamente, por cometer los dos homicidios con arma de fuego en aquellos países.
Se trata de dos operaciones diferentes desarrolladas en las últimas semanas por la Sección Fugitivos de la Policía Nacional, que lidera en Europa la lucha contra los delincuentes huidos al detener en el 2019 a 486 reclamados por diferentes países.
Las investigaciones sobre el primero de los fugitivos detenidos en Tarragona empezaron el pasado 24 de agosto, cuando la Policía Nacional recibió una información de la BKA alemana solicitando su localización y detención.
Después de la confrontación y peritaje de las huellas aportadas, se pudo determinar que coincidían plenamente con las de un individuo que residía con identidad griega en la localidad tarraconense de l'Hospitalet de l'Infant.
Los hechos por los que era buscado se remontan al 7 de agosto de 2019, cuando el detenido entró en un restaurante de Alemania y disparó en ocho ocasiones a su víctima. De los cuatro impactos que recibió, uno le atravesó el corazón, muriendo desangrada. Las autoridades alemanas le impusieron una pena de cadena perpetua.
Detenido enCollado Villalba
La detención del segundo de los fugitivos, buscado por las autoridades colombianas, se produjo el pasado 6 de octubre en la localidad madrileña de Collado Villalba.
Después de varios meses de investigación y numerosas vigilancias, se detectó su presencia en el domicilio de un familiar.
Los hechos que se le imputan sucedieron el 19 de julio de 2018, cuando, en compañía de otros miembros de su organización criminal, en un parque de la localidad colombiana de Palmira, atentó contra la integridad física de la víctima, que murió por la gravedad de las heridas ocasionadas con un arma de fuego. Las autoridades colombianas le impusieron una pena máxima de 37 años.