Tradiciones
La jornada de Todos los Santos se vive sin aglomeraciones en el cementerio de Tarragona
Desde el pasado miércoles han visitado el recinto 8.216 personas y, hoy domingo, ha sido el día de más afluencia, con un total de 1.956
La jornada de Todos los Santos de este 2020, celebrada hoy, ha sido sensiblemente diferente de la de otros años. La tradicional aglomeración de familiares de los difuntos no se ha visto y se ha dado paso a un aspecto inusual del cementerio de Tarragona en una festividad tan especial. No se han producido colas en la entrada ni en los cuatro puntos de venta de flores que había en el exterior. En la puerta principal, una persona entregaba un plano del recinto donde se indicaba que este año la salida se tenía que hacer sólo por la puerta que da al Camino del Loreto. Las diferentes calles del cementerio estaban llenas de señales indicando la dirección correcta y, sobre todo, por donde se tenía que dirigir la gente para encontrar la salida. La gran mayoría de personas ha entendido la medida adoptada por seguridad, ante la expansión de la pandemia, todo y que una minoría ha tratar de salir por la puerta principal.
Una característica de la jornada de este domingo ha sido una menor afluencia de visitantes con relación a otras celebraciones de Todos los Santos y que muchas personas han ido al cementerio solas y otros con grupos muy reducidos de dos, tres o cuatro componentes. No obstante, algunos grupos, muy pocos, superaban a las seis personas.
La Xarxa Santa Tecla, propietaria del cementerio, ha informado de que desde el pasado miércoles han visitado el recinto tarraconense un total de 8.216 personas. Hoy domingo ha sido el día con más ingresos: 1.956. El miércoles fueron 1.460 las personas que accedieron al interior del cementerio, 1.827 el jueves, 1.548 el viernes y 1.424 el sábado. El máximo aforo autorizado era de 1.200 personas. Hoy lunes el cementerio permanecerá abierto desde las 9 de la mañana hasta las 18 horas.
«Esperábamos a más gente»
Elisabet Viso, acompañada de su hermana, ha comentado a esta redacción que «esperábamos a más gente». Unos días antes ya había limpiado la tumba y colocado las flores. «Hoy he venido con mi hermana», apunta. «La organización está bien», ha dicho. En otra isla del cementerio, Sílvia Ferran ha comentado que, «realmente, hay muy poca gente». «Siempre venía antes o después y este año es la primera vez en mi vida que vengo por Todos los Santos».