Seguridad
Los alcaldes del Plaseqta se muestran preocupados por la falta de planificación
El conseller Sàmper aseguró el martes que no hay ninguna dotación económica para diseñar el nuevo plan, a pesar del compromiso del último conseller
Los alcaldes de Tarragona, Salou, la Canonja, Constantí, Vila-seca y el Morell, que forman parte del Plaseqta, se mostraron muy preocupados por la falta de planificación y de recursos, después de que el martes el conseller de Interior en funciones, Miquel Sàmper, aseguró que no hay ninguna dotación económica con el fin de desplegar las medidas del nuevo Plaseqta este año. «Los recursos son el punto débil del plan», comentó Sàmper, y buena parte de estos son necesarios para perimetrar el polígono químico con sensores que permitan conocer qué sustancias se emiten a la atmósfera en caso de accidente químico.
Es por eso que el alcalde de Tarragona, Pau Ricomà, reclama a la Generalitat que instale la red de sensores automáticos que había comprometido la consejería de Interior, y, a la vez, se mostró, ayer, «indignado por la incoherencia que demuestra el conseller de Interior». «No puedo entender de ninguna de las maneras la falta de disponibilidad para afrontar la inversión de lo que es lo más importante del Plaseqta», afirmaba Ricomà, quien añadía que «esta es una prioridad que el conseller Miquel Buch se había comprometido con el territorio». El alcalde tarraconense también adelantó que se ha puesto en contacto con el vicepresidente del Gobierno en funciones de presidente, Pere Aragonès, «con el fin de encontrar una solución al tema». El alcalde confía en que «se acabe desarrollando con la máxima seguridad». Por su parte, el alcalde de Vila-seca, Pere Segura, está en la línea de las declaraciones de Ricomà y recuerda «el compromiso tomado por el anterior conseller de Interior, Miquel Buch».
«Me parece un chiste de muy mal gusto por parte de los consellers», dijo a DiariMés el alcalde de Constantí, Óscar Sánchez, quién añadió que «seguridad y bienestar tienen que ser una prioridad y más después del compromiso del anterior conseller de Interior para reservar una partida presupuestaria». Sánchez también adelantó que «hemos quedado con la Canonja para reunirnos, es un tema que nos preocupa mucho», y lanzó que «parece que sólo les importa Barcelona y el Área Metropolitana».
«¿Cuántas cosas tienen quepasar?»
El alcalde de la Canonja, Roc Muñoz, detallaba a esta redacción que «la reunión con Constantí ya la teníamos prevista para tratar otras cuestiones, pero ahora lo aceleraremos», y añadía que «el conseller metió la pata con las declaraciones, no estamos hablando de tanto dinero, 1,5 millones de euros no es tanto para este proyecto». El alcalde canongí también se preguntaba si «cuando hicieron el traspaso de carpeta dejaron este tema aparcado, ¿lo consideran un tema menor?», y remarcaba que «después de lo que pasó con IQOXE decir eso no me parece aceptable, si no hubiera pasado nada, quizás no pasaría nada por tener el plan el2021 o 2022».
Por su parte, Pere Granados, alcalde de Salou, remarcaba que «la seguridad de las personas tiene que ser una prioridad de la Generalitat y no hay ninguna excusa que pueda justificar la falta de presupuesto», y añadía que «eso denota una falta de responsabilidad y de preocupación por la integridad física y la vida de las personas que residen en torno a la petroquímica». «Es del todo urgente que doten de los recursos necesarios el departamento de Interior para adquirir sensores», concluyó Granados.
Finalmente, el alcalde del Morell, Eloi Calbet, recordaba que «eso no es lo que se nos dijo en su día, había voluntad de coordinación por parte de todo el mundo, Generalitat, ayuntamientos, Diputació, AEQT y entidades vecinales y ecologistas, se hizo un esfuerzo muy grande y, si eso acaba en el cajón, parece que hayamos perdido el tiempo», y añadía que «al conseller Buch le pedí que, cuando se hicieran los presupuestos, reservaran una partida, si todo eso al final queda en papel mojado, sabe mal por todos los esfuerzos, pero, sobre todo, por lo que ya pasó con IQOXE. ¿Cuántas cosas más tienen que pasar?». Calbet lamentaba que «da la sensación de que eso ya no es prioritario, que ha quedado en el cajón, parece que si fuera Plaseqba –de Barcelona–, no sería así». Además, el alcalde entiende que la pandemia ha afectado económicamente a todo el mundo, sin embargo «eso no quiere decir que no se puedan hacer cosas del Plaseqta, es como la Sanidad, si no inviertes, al final te acaba saliendo más caro». En definitiva, los alcaldes del Plaseqta se muestran muy preocupados y consideran inaceptables las declaraciones de Sàmper, ya que «parece que estén jugando con la vida de la gente». Por su parte, el subdelegado de la Generalitat en Tarragona, Òscar Peris, aseguró ayer por la noche que «no escatimaráni un recurso» en el Plaseqta, aunque todavía no tiene un calendario definido.
El nuevo Plaseqta se activará sin necesidad que la empresa afectada haya informado del accidente