Religión
El arciprestazgo del Alt Camp acoge la prueba piloto de la catequesis en 3 años
El modelo, que culminan este año unos 200 niños de la comarca, se implantará en Cataluña y Baleares
El Arciprestazgo del Alt Camp acoge la prueba piloto del nuevo modelo de catequesis para la primera comunión con una duración de tres años y no de dos, como se ha hecho hasta ahora. La catequesis de tres años se quiere implantar en toda Cataluña y Baleares y propone empezar con siete años –cuando los niños cursan segundo de primaria– y finalizarla con 9 años, es decir, cuando cursen cuarto.
«Detectamos que el perfil del niño cuando llega a la catequesis ha cambiado. Toda la introducción a la fe, lo que denominamos el desvelo de la fe –como hacer una oración o ir a la parroquia y conocer los espacios– que antes asegurabala familia, las actuales no lo garantizan», explica Joan Àguila archipresto del Alt Camp y director de Secretariado Interdiocesano de Catequesis de Cataluña y las Islas Baleares. «Con la catequesis de antes, cuando los niños llegaban, el desvelo de la fe se daba por supuesto. Pero eso ahora no sucede y, aparte, la lectoescritura, el aprendizaje de la lectura y la escritura –los procesos de comprensión lectora en definitiva– son ahora más lentos y, por lo tanto, nos tenemos que adaptar a la nueva realidad y garantizar el desvelo para, después, hacer la catequesis de iniciación», añade Àguila.
En el Alt Camp, unos doscientos niños harán este año la primera comunión después de tres años de catequesis. Será la primera hornada de esta catequesis de tres años que se implantó en este arciprestazgo, donde se consiguió el acuerdo de todos los mosenes. El nuevo modelo se ha desplegado también en algunas parroquias de forma individual, donde las familias se han avenido al cambio. El objetivo es que el proceso se consolide y se implante en toda Cataluña y en las Islas Baleares. Los niños del Alt Camp que comulgarán por primera vez este año tendrían que haber esperado igualmente un año más si no hubieran hecho la catequesis en tres, ya que el estallido de la pandemia interrumpió las celebraciones. El Arciprestazgo tuvo que adaptar los contenidos para el aprendizaje telemático. Según el director del Secretariado Interdiocesano de Catequesis de Cataluña y las Islas Baleares, la experiencia ha tenido muy buena acogida entre las familias. «La mayoría son muy conscientes de la falta del desvelo, pero tampoco se quiere que se sientanculpables. El modelo se irá implantando en toda Cataluña y se probará a los arciprestazgos que ven con ánimos de hacer este cambio, de ir transformando al modelo hacia el nueve,» dice Àguila.
La experiencia del Alt Camp ha servido también para crear los nuevos recursos. «A finales de mayo, desde el Secretariado Interdiocesano de Catequesis, tendremos los recursos para funcionar con este modelo. Se hará un encuentro de formación de catequistas y los ofreceremos a partir del año que viene. Serán telemáticos, ya que también nos hemos tenido que adaptar a los nuevos tiempos», añade Àguila.
También los contenidos serán diferentes de los utilizados hasta ahora. Un equipo de personas, según Àguila, se encarga de elaborarlos. «El equipo ha ido creando una serie de recursos para que sea no tanto una catequesis de memorizar conocimientos, sino generar dinámicas con que los niños y niños vivan su experiencia personal», añade el archipresto. «El curso que viene, los niños y niñas no tendrán un cuaderno de ejercicios, sino una especie de dietario donde podrán escribir sus experiencias en el proceso de descubrir la fe y, de esta manera, se podrá hacer un seguimiento de cómo lo viven dentro de su corazón», finaliza Joan Àguila.
El estallido de la pandemia el año pasado, obligó a aplazar las primeras comuniones. Joan Àguila asegura que, este año, también se está a la espera de ver cómo evolucionan las restricciones por la covid-19 para poder empezar a celebrarlas el primer fin de semana de mayo.