La Asociación de Restauración y Ocio Nocturno de Salou propone hacer tests de antígenos a los clientes

La Asociación de Restauración y Ocio Nocturno de Salou (ARONS) ha mantenido este lunes 17 de mayo una nueva reunión con el Ayuntamiento del municipio con el objetivo de poner en marcha una serie de acciones que sirvan para dinamizar las empresas del sector de cara al inicio de la temporada turística. Entre otras, la entidad ha presentado la propuesta de realizar pruebas de antígenos a los clientes de sus establecimientos como medida para empezar a reabrir toda la actividad con plenas garantías.

«Hacer test antes de acceder a los locales sería la mejor medida para detectar posibles casos asintomáticos entre los visitantes y tener así espacios seguros para todo el mundo», defiende el presidente de ARONS, Eduardo Abenójar. La entidad, que está buscando la fórmula para financiar estas pruebas para restaurantes, bares y discotecas, celebra la buena predisposición mostrada por el consistorio en la reunión mantenida con el alcalde, Pere Granados, y otros miembros del gobierno municipal.

En este sentido, Abenójar considera que este es «un buen punto de partida para empezar a trabajar de la mano. Queremos ser el enlace entre el consistorio y nuestros asociados y, si hace falta, actuar como mediadores para garantizar la buena convivencia». ARONS, que cuenta ya con cerca de 120 empresas asociadas, trabaja para convertirse en la voz del sector en el municipio, y ha trasladado al Ayuntamiento su intención de colaborar en los diferentes actos sociales que se celebran.

Así mismo, después de más de un año sin ingresos por no poder abrir los establecimientos de ocio nocturno, ARONS ha reiterado al Ayuntamiento la petición de poder disponer de un espacio municipal para sus asociados. De este modo, los diferentes empresarios del sector podrían montar barras y llevar a cabo iniciativas para empezar a trabajar antes de que se autorice la reapertura de sus locales.

Otras peticiones que ARONS ha hecho llegar al Ayuntamiento son regular la presencia de los relaciones públicas que hay a las puertas de los establecimientos para que haya como máximo uno; poder organizar actuaciones de música vive; así como que los locales con licencia de discoteca puedan también abrir como bares.