Los fotógrafos temen perder un cuarto de su facturación con el nuevo DNI 4.0

Los fotógrafos tarraconenses temen por el futuro a corto plazo de muchas de sus tiendas físicas. En concreto, alertan de que podrían perder casi un cuarto de la facturación por culpa de la implementación del nuevo DNI 4.0. Este entrará en vigor el próximo 3 de agosto y, entre otras novedades, el gobierno español tiene la intención de que la fotografía de carné pase a hacerse en la misma comisaría de la Policía Nacional, una medida que no se implementará de forma inmediata, pero que podría ser una realidad los próximos meses. Hasta ahora, las personas que han ido a hacerse o a renovar el documento nacional de identidad tenían que llevar la fotografía ya hecha. En la gran mayoría de los casos, estas se hacen en las tiendas de fotografía profesional, por las cuales las fotos de carné son una fuente de ingresos considerable anualmente: un 21% según la asociación Empresas Unidas del Sector Fotográfico. Si se acaba materializando esta medida, sería unnuevogolpe para los fotógrafos.

«Hay compañeros que llegan a hacer 15.000 euros de facturación cada año con fotos de carné, en torno a un millar cada mes», explicaba Eric Blasco. El tesorero de la asociación Aprofot en Tarragona, con una cincuentena de miembros en la demarcación, aseguraba que «hay tiendas que se dedican y que sufren, ya que para ellos es la fuente de ingresos principal.» «Es posible que haya cierres», admitía Blasco, que detallaba que alrededor de«un95% de establecimientos hacen fotos de carné». Con todo, el sector se ha tenido que ir diversificando los últimos años con el fin de sobrevivir ante los múltiples obstáculos que se han ido encontrando. «Hace una década que ya nos sacaron el carnet de conducir, ya que las fotos se hacen a la misma revisión médica. Allí ya notamos una bajada del volumen», lamentaba el tesorero de Aprofot, que denunciaba que «aquí detrás hay intereses económicos de cara a empresas que deben vender las webcams ». Con este método, decía Blasco, «la calidad no es la misma, y pasará lo mismo en las comisarías». Además, la digitalización o la telefonía móvil también han incidido en la pérdida de fuerza de las tiendas de fotografía.

Si finalmente las comisarías de Policía Nacional acaban asumiendo la tarea de hacer la foto para el nuevo DNI 4.0, los establecimientos fotográficos profesionales tendrán cada vez menos motivos para captar clientes, ya que la foto de carné suponía no sólo un ingreso regular y asegurado, sino una fuente de atracción, tal como expresaba Blasco: «No es sólo el DNI. También es una excusa para incrementar la afluencia de gente, ya que vienen y ven que hay otras cosas que podemos hacer, y aprovechan». El tesorero de Aprofot también destacaba «la confianza en que da venir al fotógrafo de toda la vida, saber el resultado». La crítica del sector hacia la administración pública se centra en el hecho de que «es triste que el gobierno se cargue trabajos, que no es lo mismo que lo haga una gran superficie, por ejemplo. Es bastante deplorable», criticaba Blasco.

Sufrimiento por el futuro

En Tarragona ciudad las tiendas de fotografía que hagan fotos de carné no llega a la decena. Si con el nuevo DNI 4.0 se acaban haciendo las instantáneas en las comisarías, la cifra se podría ver todavía más reducida. «Perder la foto de carné será para mucha gente la estocada mortal. Nosotros no sé si podremos aguantar. Quizás es el único ingreso constante durante el año. Mantener el local, la luz, el personal, comprar stock... No se podrá. Será una pena», lamentaba Ferran Aguilar. El propietario de Foto Ferran, en la calle Higini Anglès, apuntaba que las fotos de carné son «una de las pocas cosas que nos quedaba, y eso será dramático» en caso de que se acabe aplicando la medida, que hará que «de hoy para mañana se marcharía un ingreso que hace que no nos hundimos, por lo que tendremos que cerrar y muchas familias quedarán en paro». Aguilar, que asumió un negocio de cuatro décadas de trayectoria hace cuatro años, indicaba que le parece «vergonzoso que se decida eso sin tener en cuenta lo cual pasará, sin proponer un plano B o una transición.» «Hay mucha gente que come de eso», advertía.

El sector ha tenido que ir esquivando varias crisis. Aguilar ponía de ejemplo la irrupción de la fotografía digital y el fin de los carretes y revelado, la venta online o el intrusismo laboral. Aparte, el fotógrafo tarraconense ponía el foco también en la administración local: «El abandono que hay es una desidia. Siempre se promociona el Km 0, pero nunca se protege. Es eso lo que queremos»?. En este sentido, Aguilar lamentaba que «Tarragona ya es una ciudad muerta en términos de comercio» y que como sigan cerrando más tiendas «tendrán que empezar a hacer viviendas dentro de los negocios». El propietario de Foto Ferran explicaba que «el comercio es como una viga de un techo, que se va carcomiendo poco a poco y al final se acaba rompiendo». Con todo, el fotógrafo pedía que «los cambios se hagan de forma progresiva, para como mínimo poder ponernos las pilas.»