La Canonja apuesta por el street art

Ciento veinte metros de muro por decorar con elementos propios del municipio. Este es el reto que han asumido los tres artistas de la Asociación Cultural 27.7 Artgroup, que desde hace poco más de una semana han empezado los trabajos en el muro de la rambla Collblanc de la Canonja.

«Todo surgió a partir de la propuesta de los artistas, que ya habían hecho un mural en el parque del lado de la escuela, y nos propusieron hacer un trabajo similar en este muro», explica Salvador Ferré, primer teniente de alcalde y concejal de Cultura de l'Ajuntament de la Canonja. «La idea era que, si en el anterior muro plasmamos un paisaje del pueblo, en este se pudieran ver elementos festivos, populares, edificios emblemáticos, actos culturales o incluso algún 'canongí', como el escultor Salvador Martorell,» detalla Ferré.

Los artífices de este trabajo son Miki Pérez, Leim y David Martínez. Ellos mismos hicieron una selección de imágenes, trabajando a partir del fondo fotográfico del Ayuntamiento. Una vez se acordaron los contenidos, el muro se blanqueó completamente, dando así el pistoletazo de salida al trabajo artístico. Este empezó de noche, con una proyección sobre el muro de todos los elementos que después serían pintados. Los artistas repasaron las siluetas que, a día de hoy, están utilizando como base para su obra.

El trabajo se hace a partir de una técnica mixta, con pintura plástica y acrílica, y esprays. «Queríamos que el muro no fuera un simple álbum de fotos, sino que tuviera un aspecto moderno, y por eso hemos diseñado unas transiciones entre los dibujos. Eso, junto con las gamas cromáticas que hemos escogido, acabará dando la sensación de que las imágenes salen hacia afuera, con un efecto muy impactante», explica Miki Pérez.

Los tres artistas empezaron a trabajar hace poco más de una semana, y aunque tienen por delante muchos metros de muro, confían en que a finales de mes el trabajo pueda estar terminado.

Entre los elementos que poco a poco se irán desvelando está la fachada del Ayuntamiento o del OrfeóCanongí, las dos iglesias del pueblo, los Diables de la Canonja, los Gigantes y el Mico, los Grallers o incluso algún elemento del polígono petroquímico.