Alcalde de la Canonja
«Las obras del Orfeó Canongí estarán acabadas el próximo verano»
Roc Muñoz explica que los trabajos de acondicionamiento del Mas de l'Abeurador empezarán en septiembre y en el 2023 abrirá las puertas
—¿Cómo se presenta la Fiesta Mayor?
—La encaramos con ilusión. Creemos que la Fiesta Mayor es necesaria, porque es una válvula de escape. A pesar de las restricciones, la fiesta es un momento dónde distraerse y olvidar esta pesadilla que estamos viviendo.
—La adaptación de los actos de cultura popular es uno de los principales retos a los cuales se enfrentan este año los municipios. ¿Qué fórmula han seguido?
—Ciertamente, ha sido el reto más difícil, pero no hemos querido perder la oportunidad de presentar un nuevo Mamut, un nuevo Mico de la Canonja, un nuevo nano y el Seguici Popular participando de manera conjunta en varios actos. Para hacerlo, hemos adaptado la Rambla 15 de abril, de manera que el Seguici actuará en la calzada y el público estará sentado en sillas en la acera. Como es una calle muy larga y lo que pase en un extremo de la calle no se podrá ver bien desde el otro, hemos instalado unas pantallas gigantes donde se irá retransmitiendo en directo para que nadie se pierda nada. Esperamos que salga bien y que todo el mundo pueda disfrutar de esta primera balladeta del Seguici que viviremos mañana.
—Hablaba ahora de esta primera balladeta del Seguici. ¿Qué novedades se han introducido?
—Por primera vez se ha formado la Coordinadora del Seguici Popular, que está formada por los Diables de la Canonja, el Mico de la Canonja y los Gegants, con sus nanos. Siempre habían participado en la Fiesta Mayor, pero lo hacían de manera individual. Este año, por primera vez lo harán de manera conjunta a la primera balladeta, en la ida al oficio y en la tanda de lucimiento del día 15. A todo eso hay que sumar que habrá un nuevo toque de chirimía especial para esta jornada. Además, gracias a los presupuestos participativos de hace dos años, la Canonja tiene un nuevo Mamut, que se presentó el viernes pasado. El Mico de la Canonja, que es la entidad más joven, pero una de las que tiene más fuerza, también ayer estrenó el nuevo Mico. Y los Gegants estrenan un nuevo nano, el 'pagès'.
—Además, repartirán la Canongina. ¿Qué es?
—Son 'pastillas' de Fiesta Mayor. Lo presentamos de una caja, como si fuera un medicamento. Dentro hay un díptico con todas las normas y medidas de seguridad, una mascarilla quirúrgica y unos caramelos para endulzar estos días. La idea es poner un toque de humor y no perder la alegría. Se repartirán en todos los actos en la entrada.
—Entre 2020 y este año han impulsado varias ayudas a las familias y a las empresas de la Canonja. ¿Cómo han funcionado?
—El Ayuntamiento de la Canonja puso un millón de euros encima la mesa. Hemos tenido dos campañas muy potentes dirigidas al comercio y a las empresas. La primera era una ayuda de 300 euros y la segunda, de 800, pero que podía ascender en algunos casos a 1.800 euros. Han sido recibidas de forma muy positiva, porque han sido ayudas inmediatas, de proximidad y de unas cantidades similares a las que ha ofrecido la Generalitat, cuando finalmente lleguen. Antes, sin embargo, tuvimos una primera tanda de ayudas directas a todas las personas empadronadas en la Canonja. Se trataba de una ayuda universal, no iba por renta. Entendemos que todo el mundo ha sufrido la pandemia y, por lo tanto, todo el mundo tiene derecho a recibir esta ayuda. La más interesante de estas ayudas es que eran una tarjeta monedero que se tenía que gastar en los comercios del pueblo, de manera que las ayudas devolvían al pueblo generando actividad.
—¿En qué punto se encuentra el proyecto del Orfeó Canongí?
—El Orfeó ya se está construyendo. Si se cumplen los plazos marcados en el proyecto, el próximo verano por la Fiesta Mayor ya estará acabado.
—Y con respecto al Mas de l'Abeurador, ¿cuándo empezarán los trabajos de acondicionamiento?
—Las obras ya está adjudicada y empezará en septiembre. Contamos con que estarán acabadas a finales de 2022. Mientras se estén haciendo las obras, sacaremos a concurso la museización y con cuatro o cinco meses más ya estaría, por lo tanto en verano de 2023 tendría que estar terminado.
—¿Qué otros proyectos tienen previstos?
—Tenemos diversos. Uno de los más importantes es la pavimentación en plataforma única de la Rambla 15 de abril, la calle Sant Isidre y la calle Verge de les Neus. Los trabajos estarán dotados con un presupuesto de más de medio millón de euros. El diseño ya está hecho y calculamos que durante lo que queda de año saldrá la licitación de estas obras y el verano del próximo año ya estará acabado.
—Hace unos meses se presentaba el libro con motivo de los 10.º aniversario de la municipalidad. ¿Qué valoración hace de esta primera década?
—Ha sido magnífica. No puedo decir otra cosa. La diferencia entre ser municipio y ser Entidad Municipal Desencentralitzada es enorme. En estos años hemos ido paliando los déficits estructurales que teníamos para no ser municipio y todavía nos quedan aspectos, que iremos haciendo en los próximos años.
—¿Por ejemplo?
—Tenemos un polideportivo que está ya todas las horas ocupado y tendríamos que hacer otro pabellón ligero. Son diversas las grandes infraestructuras que necesitamos y que estamos dispuestos a hacerlas.
—Por último, ¿cómo se imagina la Canonja dentro de 10 años?
—La Canonja cambiará muchísimo. Contará con más equipamientos, pero sobre todo, seguirá manteniendo un nivel alto de servicios. Uno de los que pondremos en marcha a finales de año o a principios del próximo es el servicio de recogida de basura propio. Ahora estamos sujetos al contrato que tiene Tarragona y una vez se acabe lo haremos de manera autónoma. Estamos pensando en hacer la recogida puerta a puerta, con el cambio de mentalidad que implica. Es una decisión de valientes, pero queremos sacarlo adelante.