La Pobla de Massaluca recupera la normalidad después del susto del incendio

En la Pobla de Massaluca toda la superficie forestal es de propiedad privada. El Ayuntamiento trabaja desde hace dos años en un Plan de Gestión, que ya está aprobado, y ha creado una Asociación de Propietarios Forestales que está pendiente de presentarse para buscar las máximas adhesiones posibles. La covid lo ha mantenido paralizado. Ferré está convencido de que la iniciativa tendrá buena acogida entre los propietarios de los bosques. «Aquí la gente está muy sensibilizada con esta cuestión y ahora, todavía más», ha reconocido.

El plan prevé limpiar unos bosques muy densos a consecuencia del incendio de 1994, que quemó 1.900 hectáreas. «Se han recuperado de forma natural, pero con mucha espesura de pinos por metro cuadrado, es muy exagerado e impide que crezca nada más», ha detallado el alcalde. El plan prevé contratar empresas especializadas por la retirada de biomasa, para espaciar el bosque y minimizar el riesgo de incendio. A la vez, para fomentar la sostenibilidad energética, el proyecto prevé aprovechar también la biomasa con calderas que suministren equipamientos municipales, como la escuela o el pabellón –donde también se quieren instalar placas solares– y se trabaja en un proyecto más ambicioso que permitiría hacer llegar la energía también en las casas particulares.

Baños, actividades y vacaciones

Este viernes al mediodía en el camping PortMassaluca, donde se desalojó el jueves por la tarde a los clientes y trabajadores, la situación era de plena normalidad. Campistas tomando el baño, saliendo a hacer actividades fluviales o refrescándose en la terraza del restaurante. El director del establecimiento, Albert Blasco, ha explicado que pasaron «un día complicado, de nervios», sobre todo porque el fuego se originó a un kilómetro del camping, con el restaurante lleno de gente, y con un foco del incendio que afectaba a la vegetación de ribera y que los hizo preocupar.«El camping está rodeado de campos trabajados y el riesgo de que nos afectara era bajo», ha explicado Blasco.

Sin embargo no temieron por las instalaciones y agradecen la rápida evacuación que llevaron a cabo los cuerpos de emergencias de Cataluña y Aragón, que trasladó a los clientes al centro coworking de Faió, donde los atendieron y los dieron cena.

Los campistas han dormido en sus alojamientos y esta mañana han reanudado las vacaciones y días de descanso como si nada hubiera pasado. Las llamadas que se reciben este viernes son para consultar el estado de las carreteras y si el acceso al camping es posible. «La carretera todavía está medio corte, es la única dificultad que tenemos ahora, pero se prevé que se abra por la tarde. Lo tenemos todo preparado: cocineros, recepcionistas, el camping. Esperamos que nos visiten y sigan disfrutando», ha pedido el director de Port Massaluca.